(EFE).- El neerlandés Max Verstappen (Red Bull) resistió la remontada infructuosa del británico Lando Norris (McLaren) y volvió a probar casi cuatro meses después el sabor de la victoria al llevarse la carrera al esprint del GP de Estados Unidos, en la que el español Carlos Sainz (Ferrari) sacó su ritmo a relucir y acabó segundo.
El piloto madrileño, que salía quinto, superó por ritmo a su compañero de equipo, el monegasco Charles Leclerc, y también al británico George Russell (Mercedes), para apoderarse de la tercera plaza, aunque todavía tuvo tiempo para perseguir a Norris hasta la última vuelta, un último giro en el que le apretó tanto que el británico bloqueó las ruedas delanteras en la primera curva y cedió la segunda plaza al español.
El triple campeón del mundo aventajó así en casi cuatro segundos a Sainz en línea de meta y sacó dos puntos vitales en el Mundial de pilotos a Norris, en una carrera en la que el mexicano ‘Checo’ Pérez (Red Bull), que salía décimo primero, recuperó dos posiciones y acabó noveno, el argentino Franco Colapinto (Williams) acabó décimo segundo y el español Fernando Alonso (Aston Martín), décimo octavo.
Aunque el neerlandés no gana en domingo desde que lo hiciera el pasado 23 de junio en Montmeló (Barcelona), Verstappen insiste con su triunfo en su dominio bajo las carreras al esprint, en las que acumula cuatro triunfos en otras tantas carreras, y sostiene así ese liderato del Mundial de pilotos al que Norris sigue sin acercarse.
Una gran remontada de inicio para Norris
Con una gran reacción cuando los semáforos se apagaron, Verstappen cogió el interior de la primera curva y se escapó enseguida de Russell y Leclerc, que se enfrascaron en una batalla durante la primera vuelta de la que se aprovechó Norris para pasar a ambos en un abrir y cerrar de ojos y colocarse segundo.
Norris, que necesitaba dar un paso adelante en este circuito para seguir persiguiendo a Verstappen, se encontró con que no podía mantener el ritmo de ‘Mad Max’ y no sólo eso sino que tenía que estar más pendiente de Russell que de Verstappen.
Mientras Sainz superaba con un fino adelantamiento a su compañero Leclerc para auparse a la cuarta posición, Russell intentaba hacer lo propio ante Norris, que no obstante se supo mantener entero y aguantar el error del británico, que acabó perdiendo unas décimas que le empujaron a la pelea por la tercera plaza con Sainz y Leclerc.
El madrileño, con un gran ritmo que ya exhibió en los primeros entrenamientos libres, adelantó al británico como si nada para colocarse tercero y Russell todavía cayó un puesto más abajo, hasta la quinta, cuando Leclerc también le sobrepasó, lo que exhibió el nivel de los Ferrari.
Todo ello ocurría mientras Verstappen empezaba a perder algo de tiempo con respecto a Norris, ya sin miedo a lo que ocurría a su espalda, y mientras Fernando Alonso intentaba hacer algo con su AMR24, que no reaccionó en la salida y se fue hasta la décimo sexta posicion al dejarse dos posiciones.
Le fue algo mejor al mexicano ‘Checo’ Pérez (Red Bull), que rápidamente se colocó en décima posición superando al argentino Franco Colapinto (Williams), pero se encontró incapaz de pasar al japonés Yuki Tsunoda (Visa Cash App RB) durante doce vueltas, lo que le frenó su remontada hacia los puntos, ya que terminó noveno.
Tampoco pudo llegar a esas primeras posiciones el australiano Oscar Piastri (McLaren). Salía décimo sexto y no tuvo problema en pasar a Alonso, a los Alpine e incluso a Colapinto, pero una penalización de cinco segundos evitó que el australiano, con un McLaren que continúa siendo uno de los mejores coches de la parrilla, terminara más arriba.
Sin demasiadas novedades por detrás, los ojos estaban puestos en las primeras plazas, pues Norris perdía tiempo con Sainz y no podía recuperar segundos a Verstappen, una situación que le impacientó en exceso y que le hizo empezar a equivocarse en la trazada de las curvas, como lo que le ocurrió en la primera curva de la última vuelta.
Esa bloqueada de Norris, en la que se fue demasiado al interior y bloqueó neumáticos al querer girar, mostró el ansia del británico por acercarse de manera estéril a Verstappen y no sólo tuvo un beneficiado en Sainz, que acabaría segundo, sino también en Verstappen, que ganó un punto más en una clasificación de pilotos que ahora lidera por 54 puntos.
Carlos Rosique
(c) Agencia EFE