Ponce insiste en la estética
El valenciano ‘desorejó’ al cuarto de la tarde en Mérida
Toro bajito y de manos muy cortas, el cuarto fue uno de los toros buenos de la corrida. Ponce lo toreó muy bien con el capote y también le ‘pegó’ un quite por chicuelinas muy ceñido. Fue un toro con un notable fondo de bravura, que no dejaba relajarse. El valenciano tuvo siempre la intención de torearlo ceñido y despacio. Cuidando la estética, al máximo. Por el pitón derecho, sobre todo, lo ha conseguido ligar y sacar tandas de gran importancia. Lo mató por derecho y el público pidió con motivos las dos orejas, que le fueron concedidas.
Rompió plaza un astado serio, muy bien hecho, pero serio, que de salida tuvo calidad y nobleza, pero dándose la vuelta al revés y se abría mucho, apuntando poco fondo y no mucha fuerza. Toro noble, en bueno y que cumplió en varas, pero con esos defectos. Ponce estuvo bien con el capote. Faena con aplomo, pero sin apretar al toro, a la medida del animal, por eso ha durado más. Lo mató de estocada, pero tardó en doblar y en ser apuntillado, por ello, el balance fue una gran ovación tras petición.