La rechifla en contra de Maru, igual que la de Duarte y Corral
Cesar Jáuregui y Gilberto Loya enfrentados a causa de la inseguridad.
Que el grito costó 50 millones. ¿Para quién sería el diezmo?.
Muy bonitos los policías estatales en el desfile, pero en las calles no sirven para nada.
Cuando Cesar Duarte Jaqués llegó a su tercer año de gobierno, recibió una manifestación del respetable, un abucheo generalizado de los asistentes al grito de independencia, lo mismo le pasó a Javier Corral. Si los ex gobernadores hubieran hecho caso de este tipo de manifestación que fue espontánea, es posible que no hubieran terminado tan mal en su administración y menos en el caso de Duarte haber tenido que pasar 4 años por el proceso penal que le armó Javier Corral.
Esto mismo le sucedió a la gobernadora Maru Campos, que llegó a su cuarto grito de independencia. La concurrencia actuó igual que con Duarte, y Corral fueron cinco minutos de rechiflas y gritos en contra de la gobernadora, a ella se le hicieron eternos. Los técnicos del sonido tuvieron que apagar el audio y solo dejar imágenes de lo que estaba ocurriendo en el palacio de gobierno el domingo por la noche.
Maru va a la mitad del camino, es necesario hacer una reflexión de lo que se ha hecho bien, pero sobre todo de lo que falta por hacer o se ha hecho mal. El tema de seguridad es algo que el estado ha quedado a deber, y no es por falta de recursos, ya que miles de millones de pesos los que se han concentrado en la Secretaría Estatal de Seguridad Pública y no hay resultados.
Por supuesto, no es se trata de un presagio lo de las rechiflas, pero en una autocrítica del sistema de gobierno, la mandataria estatal debe de tener muy claro que es lo que ha estado fallando. Tiene el tiempo suficiente para hacer una entrega del estado con buenas noticias y que no termine en los problemas judiciales como los que trae Cesar Duarte y el mismo Javier Corral.
Trascendió en las corporaciones policiacas, que el Fiscal General del Estado Cesar Jáuregui y el Secretario de Seguridad Publica Gilberto Loya, traen un enfrentamiento muy fuerte por el trabajo que realizan ambas instancias, pero principalmente porque se echan culpas por la inseguridad que priva en la entidad.
Gilberto Loya traia piques con el ex fiscal Roberto Fierro por supuestos intereses que «El General » le estaba echando a perder a Gil Loya, la sangre llegó al río y finalmente quien fue destituido de su cargo fue Roberto Fierro, con el desenlace trágico que todo mundo conoce de la sangrienta fuga del cerezo de Ciudad Juárez en donde por cierto, no hubo castigo para los funcionarios de Maru Campos, solo premios ahora el ex fiscal es secretario de la función pública.
Ahora de nueva cuenta, los piques entre la secretaria de seguridad y la fiscalía del estado se dan por todos lados desde las oficinas y a bordo de las patrullas, supuestamente no es la primera vez que Cesar Jáuregui culpa a Gil Loya por los problemas de inseguridad que vive Chihuahua.
Pero Gilberto Loya y su gente, también le han referido a Cesar Jáuregui que sus agentes del ministerio público, andan muy hambrientos y que las querellas en contra de los delincuentes que logran su libertad apenas son detenidos, son gracias a los favores que cuestan muchos millones de pesos.
Trascendió por las redes sociales que el estado pagó 50 millones en la organización del Grito de Independencia. Se sabe que desde la administración municipal de Maru Campos en Chihuahua los moches y los diezmos estaban a la orden del día, hoy no parece ser diferente, pero ahora cada transa-accion vale muchos millones. Deberían medirse mas, ya que traen a un Javier Corral que despechado por su intento de aprensión, juró sobre la biblia destapar la corrupción que priva en estos momentos en Chihuahua.
Muy bien se veía toda la policía estatal, uniformes muy vistosos, vehículos de lujo que fueron facturados a sobre precio y los tres helicópteros sobrevolando el centro histórico, dos de estos costaron 67 millones de dólares.
Pero en las calles de Chihuahua, como dice Tony Meléndez en su canción, tienen perdida la batalla. De Coronado, a Ojinaga, Manuel Benavides, Coyame del Sotol y en el Sauz, Chihuahua, no hay presencia de esta extraordinaria policía que se mostró en el desfile del 16 de septiembre. Menos en la sierra que se encuentra tomada por el narcotrafico.
