Pese a la pandemia, trabaja para elevar su nivel
AARÓN ARGUIJO GAMIOCHIP
Ya son 120 días en que se cerraron las puertas de las plazas de toros en el mundo entero, como medida sanitaria por esta pandemia del coronavirus COVID-19 que ha representado afectaciones en todo el planeta.
Tal es el caso de Arturo Gilio Quintero, lagunero que con una afición que no le cabe en el cuerpo, empezó a ponerse en contacto con ganaderos para que, de una manera responsable y con todas las medidas sanitarias, lo pudieran invitar a tentar en sus fincas. La respuesta no se hizo esperar y como hay toros puestos en el campo que no se pudieron lidiar en las plazas este año, empezó a recibir invitaciones para continuar con su preparación, la cual tuvo que interrumpir durante este verano y quedarse en México, no en España, como lo tenía planeado.
INVITADO Muchos kilómetros tuvo que recorrer para continuar preparándose y estar a punto para cuando se vuelvan a abrir las plazas de toros, una fecha que aún se mantiene en la incertidumbre, como muchísimas otras actividades en el mundo. Ganaderías como La Punta, Pablo Moreno, La Concepción, San Constantino, Arturo Gilio y La Concha, le han abierto las puertas a «Arturillo», quien ha tenido en varias ocasiones, la oportunidad de matar toros a puerta cerrada, unificando criterios en que Arturo Gilio es un torero con enorme potencial.
HAN TRANSCURRIDO, DESDE QUE SE ORDENÓ
LA PAUSA EN LOS FESTEJOS TAURINOS.
Mientras tanto, Gilio no pierde la oportunidad de poner a prueba sus facultades, valor y técnica, estructurando faenas completas, llenas de entrega como si estuviera en una plaza de toros llena a reventar. Arturo viene de dos años muy productivos y repletos de logros, no solamente al cortar orejas, sino al ser considerado para torear en plazas emblemáticas y de primera categoría, en las que cualquier torero se siente realizado al ver su nombre en el cartel.
Además de la actividad en la tienta en el campo bravo, Gilio Quintero se ejercita en casa con su entrenador personal y ha aprovechado la reapertura parcial de los gimnasios en Coahuila, para acudir a un centro deportivo y trabajar en las pesas y aparatos. La tauromaquia, al igual que muchísimas actividades deportivas, culturales y sociales, se encuentra detenida en todo el mundo, sin posibilidad de efectuar festejos, para evitar la congregación de personas en un solo lugar y así disminuir el riesgo de contagios del coronavirus.
Toreros, empresarios, monosabios y aficionados, están a la espera de la reactivación.