La columna
POR CARLOS JARAMILLO VELA
· Trump y sus halcones: al asedio de Sheinbaum.
· Imposición de Rosario Piedra en la CNDH: ¿alguien duda que AMLO sigue mandando?
Al parecer será rígida la postura que asumirá el próximo presidente de Estados Unidos, Donald Trump, frente a la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum. Los nombramientos hechos por el republicano para la integración de su gabinete gubernamental, presagian un endurecimiento de la relación con nuestro país, e incluso con el resto de América Latina.
En días recientes el mandatario entrante realizó varios designaciones para cargos de alta importancia dentro de su gabinete, que comenzará a fungir en enero. Nombró como Secretario de Estado a Marco Rubio, senador republicano conservador, de origen cubano. Al también ultraderechista republicano, Matt Gaetz, le asignó el puesto de Fiscal General, mientras que para Director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) -cargo coloquialmente descrito como “Zar de la Frontera”-, designó a Tom Homan. Rubio y Gaetz se han distinguido por ser críticos de México, así como férreos opositores a la inmigración ilegal y el terrorismo, mientras que Homan ha dicho que bajo el liderazgo de Trump, el ICE efectuará la mayor operación de deportación que jamás se haya visto en la historia de Estados Unidos. Con tal claridad en su definición política llegan los funcionarios de Trump.
El perfil radical de estos personajes cercanos a Trump, ha hecho que los medios de comunicación los denominen “Halcones”, dadas sus intransigentes posturas respecto al combate a la inmigración ilegal, así como contra el narcotráfico y los regímenes dictatoriales en América Latina. Esto es solo una admonición de lo que viene para Sheinbaum. La presión de Trump contra México no se hará esperar, pues en materias de seguridad (inseguridad e ingobernabilidad causadas por la delincuencia organizada), migración (ilegal y desbordada) y política (reformas retrógradas, pérdida de libertades, restricción de derechos, extinción del régimen de república democrática, contravención al TMEC e imposición de prácticas afines a la dictadura), el actual gobierno de nuestro país, y su inmediato antecesor, están reprobados.
Trump será para Sheinbaun un vecino incomodo, porque analizará a detalle todo lo que ésta diga y haga; y se convertirá en un férreo fiscalizador de su desempeño. Estados Unidos, con Trump al mando, no dudará en usar sus enormes recursos materiales, financieros y humanos para impedir, en cuanto le sea posible, que la negligencia y malas decisiones impuestas por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, hoy secundadas en forma devota por Clauda Sheinbaum, sigan afectando los intereses económicos y bienestrar de los habitantes de la potencia norteamericana.
Es vergonzoso lo ocurrido en el Senado de México durante la madrugada del miércoles 13 de noviembre, cuando los legisladores de Morena y sus aliados
votaron para reelegir a Rosario Piedra Ibarra, como presidenta de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), no obstante ser la peor evaluada de las quince personas aspirantes al cargo. Para lograr tan indignante y absurda decisión los operadores políticos lopezobradoristas -dirigidos por Adán Augusto López- inexplicablemente incluyeron a Piedra en la terna final, a pesar de su pésimo desempeño en la titularidad de la CNDH -durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador-, y de ser la menos apta para el puesto. La razón, o más bien la sinrazón de esto, es la obstinación del expresidente López Obrador a favor de Rosario Piedra, para imponerla de nuevo en esa posición.
La orden de AMLO a los senadores morenistas y aliados, emitida a través de Adan Augusto, fue taxativa: “que pese a todo, todos voten por ella”; así lo hicieron, y quedó demostrado una vez más que López Obrador continúa siendo el real poder en México, detrás de la Presidenta Claudia Sheinbaum. Al final de la sesión, como si se tratara de una tertulia, los morenistas y sus comparsas le cantaron las mañanitas a López Obrador, con motivo de su cumpleaños y gritaron a coro: “¡Es un honor estar con Obrador!”. ¡Qué pena!; estas idignantes acciones son un insulto al decoro político, a las instituciones de México, y a las y los mexicanos.
carloshjaramillovela@yahoo.com
Miembro de la Asociación de Editorialistas de Chihuahua, A.C.