Editorial Mediotiempo –
Alou Koul, un joven australiano de 20 años que juega para el Stuttgart alemán, le dio forma a un memorable gol que ha dado la vuelta al mundo entero, el cual le ayudó a su representativo a sacar el empate de 1-1 ante Irak en la Copa Asiática Sub-23.
Cuando estaba por finalizar la primera parte del encuentro, Kuol recibió un centro desde la banda derecha que le quedó retrasado, pero como último recurso se animó a realizar una especie de «escorpión», intento que le valió para hacer el golazo.
“Estaba corriendo hacia adelante y vi la pelota pasar detrás de mí, y pensé: ‘Sí, hagámoslo’”, dijo Kuol, según el sitio web de los Socceroos. “No pude hacer nada más, así que simplemente lo golpeé y salió», abundó.
«¿De 10? Yo le daría un cinco. Eso es normal. ¡Solo dame la misma pelota y lo haré de nuevo! Estoy mintiendo, eso fue agradable», bromeó.
Ya transcurrido medio año de 2022, la anotación se convierte en sólida candidata a ganar el Premio Puskás, el cual premia al mejor gol del año.