El Universal
(EL UNIVERSAL).- Ante estudiantes del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), la candidata presidencial opositora, Xóchitl Gálvez Ruiz, habló por primera vez en su campaña del caso de su hermana, que está encarcelada como presunta integrante de un grupo de secuestradores.
La abanderada de la coalición Fuerza y Corazón por México señaló que pese a que lleva 12 años en prisión, sin sentencia, nunca ha utilizado sus cargos públicos para tratar de liberarla.
«Yo no sé si es culpable, no sé si es inocente. Ella dice que es inocente, yo le creo porque es mi hermana, pero será un juez el que determine si es culpable, y si es culpable lo va a pagar, de eso tengan la certeza. En estos 12 años no he usado mi cargo como senadora para buscar impunidad», remarcó.
Con la voz entrecortada, narró que visita constantemente a su hermana en prisión y eso le ha permitido conocer la situación que prevalece en las cárceles.
«No es un tema fácil para mí, pero lo voy a abordar, porque conozco las cárceles por dentro. Cada semana estaba en Santa Martha Acatitla y la visité en una cárcel de alta seguridad y me queda claro lo duro que es la cárcel», señaló.
Xóchitl Gálvez subrayó que es una mujer de instituciones, por lo que confía en la justicia.
Xóchitl Gálvez no perdonará impuesto si llega a la Presidencia
Ante un Auditorio Raúl Bailleres completamente lleno y cientos de estudiantes que tuvieron que seguir el evento en una pantalla de televisión gigante que se colocó en una de las explanadas del plantel, la candidata opositora dijo que respeta la ley, por lo que, de llegar a la Presidencia de la República, no perdonará impuestos a ningún empresario.
Dijo que tampoco habrá influyentismo y sus hijos no se beneficiarán con contratos, pues son jóvenes muy trabajadores.
Señaló que después de que ella gane las elecciones, su hijo Juan Pablo, sentado en segunda fila del auditorio, no declarará ante los medios que no sabe a qué se va a dedicar, pues ya tiene un empleo y es muy «chambeador».
En otro tema, narró que en el año 2000 ella no quiso integrarse al gabinete del expresidente Vicente Fox, aunque sí aceptó hacerse cargo de la nueva oficina de atención a los pueblos indígenas.
Recordó que en aquella elección no votó por Fox, sino por Gilberto Rincón Gallardo.