- En el marco del Blue Monday (16 de enero), WeWork hace un llamado para combatir la estigmatización de la salud mental en el trabajo y promover esquemas que prioricen el bienestar de los colaboradores.
- México ocupa el primer lugar a nivel mundial en estrés laboral, con 75% de su fuerza de trabajo bajo esta condición.[i]
Ciudad de México, 13 de enero de 2023.- Frente al Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, que cada año se conmemora el 13 de enero, y de cara al llamado “Blue Monday”, considerado como el día más triste del año, que este 2023 ocurrirá el día 16 del mes en curso, WeWork hace un llamado para sensibilizar a las organizaciones sobre la importancia de priorizar la salud mental de sus colaboradores y reducir el estrés laboral.
De acuerdo con datos del Indicador de Horas Trabajadas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), los mexicanos destinan en promedio más de 2,255 horas al año a su trabajo[ii], lo que representa un estimado de 43 horas a la semana, la cifra más alta entre las 35 economías que integran el organismo internacional. Por este motivo, siendo su trabajo la actividad a la que destinan la mayor parte de su tiempo, es importante que las compañías desarrollen políticas que promuevan un buen equilibrio entre la vida personal y laboral de sus empleados. Lo anterior cobra vital relevancia puesto que México ocupa el primer lugar a nivel mundial en estrés laboral, con el 75% de su fuerza de trabajo bajo esta condición.
Según lo señalado por el estudio “Más allá de la revolución híbrida: la paradoja del trabajo flexible en Latinoamérica”, realizado por WeWork en colaboración con Page Resourcing, alrededor del 78% de los mexicanos considera que la adopción de un modelo híbrido de trabajo ha impactado profunda y positivamente en su salud mental, además de que ha favorecido su productividad (83%) y ha incrementado su lealtad hacia la compañía (80%).
En ese sentido, la flexibilización de los modelos de trabajo resulta cada vez más importante, y puede ser una alternativa para incrementar los niveles de satisfacción y felicidad de los colaboradores, al permitirles desarrollar herramientas de autogestión y brindarles la oportunidad de mantener espacios de interacción, tanto en su vida personal como profesional. Además, la implementación de un modelo de trabajo híbrido brinda la posibilidad de reducir tiempos de traslado y, por ende, aumentar la cantidad de horas disponibles para uso personal.
En línea con lo anterior, de acuerdo con el mismo estudio, cerca del 80% de los profesionistas mexicanos refieren que cambiarían de empresa por falta de flexibilidad, y el 94% considera que contar con este beneficio mejora su estado de ánimo, favoreciendo su motivación para las labores del día a día. Así, la adopción de esquemas híbridos de trabajo puede tener un impacto positivo en la retención y atracción de talento dentro de las organizaciones.
Ahora, la flexibilidad y el bienestar son elementos no negociables que las empresas no pueden permitirse ignorar. Dar a los colaboradores mayor control y autonomía sobre sus horarios, les brindará un mayor sentido de confianza personal, así como de independencia y responsabilidad por su propia productividad.
Siguiendo esta línea, las empresas que brinden espacios, procesos, acompañamiento y herramientas que susciten el desarrollo profesional en un ambiente donde se priorice la salud mental pueden hacer la diferencia. Son innegables los beneficios cuando una organización se mantiene consistentemente como un buen lugar de trabajo y, por lo tanto, cuenta con empleados satisfechos; sin embargo, si bien el trabajo híbrido tiene muchos beneficios para lograr este objetivo, es importante reconocer que también conlleva desafíos únicos.
“Este esquema no debe consistir únicamente en pedirles a los empleados que regresen un par de días a la semana a la oficina, sino que debe tratarse de crear experiencias atractivas que los apoyen a sacar el máximo provecho de su tiempo ahí, para que puedan sentir los beneficios. Además, los líderes deben comprender que el trabajo híbrido no es igual para todos, y puede variar desde estar en la oficina tres días a la semana, dos veces al mes o durante una semana completa cada trimestre”, señala Karen Scarpetta, Regional General Manager de WeWork LATAM. “Ser perceptivo y flexible a las necesidades de cada colaborador de manera individual, entendiendo sus situaciones personales, ayudará a ofrecerles la alternativa que más los beneficie”.
Dada la transformación de los modelos de trabajo en los últimos años, estamos en un momento crucial en el que el buen liderazgo es más importante que nunca. Para las organizaciones, permitir horarios de trabajo flexibles dará como resultado equipos más felices, más comprometidos y productivos.
Además, asegurarse de que los colaboradores tienen la confianza suficiente de entablar conversaciones abiertas con sus líderes sobe lo que está funcionando bien, lo que debe ajustarse y cómo está impactando su salud emocional y mental a sus actividades diarias, así como facilitar acceso a la atención de salud para los empleados que lo necesiten, es vital para mantener un buen flujo de trabajo. Solo entonces, el trabajo híbrido será sostenible.