Actualmente se discute una iniciativa para que el Ejército continúe apoyando en labores de seguridad pública
En pleno debate en el Congreso para extender la presencia del Ejército en las calles, apoyando en labores de seguridad, y con la reforma que avala el pase de la Guardia Nacional a la Sedena, la violencia no cesa en México, donde a inicios de esta semana marcó un hito en Orizaba.
Aunque, por un lado, el presidente Andrés Manuel López Obrador pareció minimizar los hechos ocurridos en el municipio veracruzano, acusando a sus opositores de usarlos como propaganda contra su gobierno, también se ha referido a otros actos violentos como los homicidios registrados ayer en Guanajuato para justificar la necesidad de mantener al Ejército en labores de seguridad.
El sexenio de López Obrador, de acuerdo con cifras del Inegi, se perfila a ser el más violento. Hasta el 31 de julio de 2022, se habían registrado 128,152 homicidios, una cifra con la que ya se superaba al gobierno de Felipe Calderón, en el que se reportaron 121,613 en total.
COMPARATIVAS
En los tres primeros años del gobierno de Calderón Hinojosa, se registraron 42,676 homicidios dolosos, mientras que en el primer trienio de López Obrador sumaron 110,059 las muertes violentas, es decir, si se comparan ambos periodos, con el actual mandatario hay un incremento de 157% en ese delito.
Además, si se consideran los delitos de los primeros cuatro años del panista, aun así las cifras son menores, pues en esos 48 meses se registraron 68,433 eventos, lo que representa 59,719 menos homicidios dolosos que los registrados entre el 1 de diciembre de 2018 y el 31 de julio de 2022.
El sexenio de AMLO tampoco muestra una reducción en homicidios frente a los registrados durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, ya que si se comparan los tres primeros años del priista frente al mismo periodo del gobierno de López Obrador, en este sexenio hay un incremento de 72%, pues ese delito pasó de 63,835 casos entre 2012 y 2015 a 110,059 entre 2019 y 2022.
DESPLIEGUE DE MILITARES
Recientemente, un artículo de Los Angeles Times puntualizó que en el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, más de 200 mil elementos de las Fuerzas Armadas han sido desplegados México, el doble que en cualquier momento desde que en la administración de Felipe Calderón se lanzó una guerra contra los narcotraficantes.
Se trata de los miembros del Ejército y de la Marina, así como de más de 92 mil elementos de la Guardia Nacional, que ha sido entrenada y formada en su mayoría por antiguos soldados, detalla la publicación titulada «AMLO prometió poner fin a la guerra contra las drogas. En cambio, ha duplicado el número de tropas».
El medio estadounidense también hizo un recuento de los muertos por la violencia en México en lo que va de 2022, y reportó, con fecha del 21 de agosto pasado, que 10 mil 452 personas han sido asesinadas, señalando que con AMLO, los homicidios superan los 35 mil al año y otras 30 mil personas han desaparecido durante su mandato.
ARGUMENTOS
Sobre este escenario, el presidente López Obrador ha dicho que su administración dista de las de sus predecesores y presumió apenas en los spots de su Cuarto Informe de Gobierno que bajo su gobierno hay una disminución de los delitos.
Además, ha presumido rasgos positivos en los últimos años que supone, no habrían sido posibles sin la Sedena en tareas de seguridad pública, algo que el mismo AMLO reprochó en campaña, pero cambió en su narrativa antes de asumir el poder, a finales de 2018.
Así, el jefe del Ejecutivo federal ha defendido los siguientes argumentos para trasladar el control operativo de la Guardia Nacional a la Defensa Nacional y que el Ejército siga apoyando en las calles:
- Que la delincuencia organizada es una amenaza a la seguridad nacional y los grupos criminales son cuasimiltares.
- Que la Guardia Nacional garantizaría su continuidad y consolidación bajo el control de la Sedena.
- Que las instituciones castrenses han generado confianza entre la población, contrario a las policías existentes.
- Que los resultados respaldan intervenciones de militares en tareas de seguridad pública.
- Que la Sedena es un pilar fundamental para el desarrollo de México y se diferencia de otras instituciones militares de América Latina.
Este miércoles, mientras la iniciativa sigue en discusión, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que con los cambios a la Constitución para mantener la presencia de las Fuerzas Armadas en tareas de seguridad se podrá contar con 500 mil elementos en todo el territorio para recuperar la paz.
Asimismo, arremetió contra los legisladores del PAN que no apoyan el uso de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad pública, al señalar que su doctrina es la hipocresía.