Los agentes se han inmiscuido en delitos como la extorsión, secuestro y amenazas a la ciudadanía, entre otros
Federico Martínez Vargas /
Chihuahua– En lo que va de la administración corralista, al menos una veintena de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal se ha visto inmiscuida en diversos delitos de extorsión, secuestro exprés, trabajos para el crimen organizado y amenazas a la ciudadanía, incluso en el homicidio de una de sus compañeras.
Uno de los más recientes casos fue la desaparición de una pareja en Ciudad Juárez, en donde después de ser arrestados, habrían sido entregados a sujetos desconocidos en otro vehículo, de acuerdo con declaraciones de dos detenidos, los cuales ya fueron liberados.
Otro de los más recientes se registró el pasado 27 de octubre del 2020, cuando tres elementos de la SSPE fueron vinculados a proceso penal por disparar a un domicilio de la colonia 2 de Junio, generando la muerte de Jennifer Aylin N., menor de 14 años que ahí habitaba.
Jasón Constantino N., Aarón N. y Marco Antonio N. fueron acusados de haber disparado sus armas de fuego de cargo contra el domicilio donde habitaba la adolescente, impactando una de las balas en la cabeza, lo que habría ocasionado su muerte.
A esta lista de casos se sumó también el de Guillermo H., quien el 29 de agosto del 2020 disparó en varias ocasiones contra Alejandra N., psicóloga de la Fiscalía General del Estado, para después atropellarla.
El elemento policiaco fue vinculado a proceso acusado de homicidio.
Otro de los casos más sonados ha sido la detención de Eladio R. R., Jorge Iván M. L., Eduardo Gregorio E. G. y Carlos Armando C. R. mediante órdenes de aprehensión en la zona occidente el pasado 15 de julio del 2020.
De acuerdo con la carpeta de investigación 163/2020, los tres elementos del orden público estatal interceptaron a bordo de las unidades oficiales a una persona en el exterior de un negocio en la ciudad de Cuauhtémoc, a la cual privaron de la libertad en su vehículo por tres horas, en hechos ocurridos el pasado 25 de mayo.
Tras una negociación, el afectado fue trasladado a una bodega de su propiedad, en donde los 4 policías estatales se apoderaron de diversos artículos, además de advertirle que le impondrían el pago de una cuota, para lo cual los agentes lo estuvieron intimidando vía telefónica.
Otro caso fue el de dos elementos de esta corporación asignados a la Policía vial, detenidos el viernes 26 de junio del 2020 en Ciudad Juárez por actos de delincuencia organizada, ya que ambos oficiales proporcionaban información a un grupo delictivo en torno a los operativos realizados por las fuerzas de seguridad estatal.
Los agentes fueron identificados como Miguel P.M. y Francisco Ernesto A.L., los cuales al momento de sus detención tenían dos meses destacados en aquella ciudad fronteriza.
Otro de los hechos fue la detención de 9 agentes de la SSPE por los delitos de robo y abuso de autoridad, el caso ocurrió el pasado 30 de enero del 2020 en Ciudad Juárez, los oficiales detuvieron a un joven, el cual fue trasladado a su domicilio, en donde los agentes se introdujeron para sustraer 100 mil pesos en efectivo y dólares, así como joyería, una caja fuerte y objetos personales, los cuales cargaron a un vehículo particular que estaba estacionado afuera del domicilio del afectado, al que se llevaron detenido.
En estos hechos dos elementos involucrados lograron escapar y permanecen prófugos de la ley, logrando detener a ocho de los involucrados en Ciudad Juárez y uno más en esta ciudad, al ser convocados a un pase de lista.
La denuncia se dio hasta el 20 de junio del 2020, cuando el padre del menor y propietario del domicilio del robo interpuso la denuncia correspondiente en contra de los uniformados.
Meses después, el denunciante fue localizado sin vida.
Derivado de dicha denuncia, los agentes identificados como Francisco Javier H. L., José Luis C. C., José S. L., José Antonio R. G., Julián Antonio G. A., Manuel G. C., Ricardo G. C., Cristóbal Isaac A. V. y Luis Alfredo A. C. fueron detenidos y puestos a disposición de un juez local.
A esta lista se sumó el caso de Francisco Javier N., policía estatal detenido por elementos de la AEI, FGE Zona Centro y la Comisión Estatal de Seguridad (CES), por ser probable responsable de los delitos de robo y secuestro exprés.
De acuerdo con la indagatoria, fue en los meses de junio y septiembre del 2019 cuando presuntamente participó en el robo a dos instituciones bancarias ubicadas en esta ciudad, además de retener contra su voluntad a quienes ahí se encontraban, mientras se perpetuaba el hurto.
Aunado a estos dos hechos, se encuentra la desaparición forzada de tres hombres en Cuauhtémoc a manos de dos mandos de la Comisión Estatal de Seguridad, ocurrida el 9 de junio del 2017.
El comisario del Mando Único en Cuauhtémoc, Jesús Cortés Jiménez, y el director Israel Córdova Castro, fueron sentenciados a 28 años y medio en prisión el 10 de abril del 2019 por el delito de desaparición forzada, convirtiéndose en la primera condena de este tipo en el país.
De acuerdo con las investigaciones del Ministerio Público adscrito a la Dirección de Control Interno de la FGE, los hechos ocurrieron el 9 de junio de 2017, cuando policías estatales arrestaron en la colonia La Ciudadela a Jesús Manuel Guadarrama Cisneros, Daniel Valladolid Martínez y Leonardo Arcos Mora, los cuales estuvieron bajo resguardo de ambos mandos, encargados de la seguridad pública municipal en aquella región.
Los detenidos en ningún momento fueron ingresados a una celda ni remitidos a alguna otra autoridad policial. Hasta la fecha permanecen en calidad de desaparecidos.
Dentro de estos eventos, se encontró también el de Saúl Alberto Miranda Suárez, encargado de la División de Inteligencia de la SSPE, investigado por elementos de la FGE por una denuncia de dos supuestos delitos.
Las indagatorias se dieron después de que la FGE recibió de manera anónima información que vinculaba al jefe policiaco con el grupo delictivo “Los Salazar”, acusado de asesinar a la periodista Miroslava Breach, en marzo del 2017.
Miranda Suárez habría sido mencionado mediante mantas colocadas simultáneamente en Juárez y Chihuahua por sus supuestos nexos con “Los Salazar”, grupo dirigido por Crispín Salazar Zamorano.
Aunado a esto, hace un año fue acusado junto con tres elementos más, de presuntamente proteger a un grupo de huachicoleros que operaba en esta ciudad.