Una carta al ego
Querido #ego, gracias por todo los que has hecho por mi hasta ahora.
Por cuidarme de los accidentes, de quemarme, de ahogarme, de estar allí para mí protección, eres mi guía y mi vehículo en este mundo que hemos construido juntos.
Gracias por permitirte y estar cuando te necesito, cuando deseo ayudar, cuando deseo dar amor, en el abrazo a mi hermano.
Solo te pido una cosa, hagamos todo con calma, nadie nos está apurando, nadie nos persigue, nadie nos ataca, cada persona que ves querido ego, está para transformarnos.
¿Por qué no te gusta esperar?
El tiempo es una molestia porque?
Sabes que los enamorados burlan el tiempo, no se preocupan de las horas que pasan con su ser amado.
Incluso quieren detener tiempo.
Cuando te enamoras de la vida el tiempo es tranquilidad ni siquiera sabes que existe.
Hagamos una alianza ya no estemos en conflicto.
No pienses cosas que aún no suceden, no crees un malestar en nosotros si no ocurre ahora.
Si vamos a comer, comamos, si vamos a caminar, caminemos no te dejes controlar por la mente.
Ves hemos estado haciendo lo contrario, estamos comiendo y pensando otra cosa, no hay consciencia, entonces no estamos comiendo, estamos energéticamente haciendo algo en la mente y no el presente.
Así con todo lo que hagamos.
Te aseguro que seremos el mejor equipo tu y yo juntos imagina lo que podemos hacer.
Pero primero quiero saber algo de ti.
¿Cómo te sientes viviendo?
¿Tienes miedo?
Recuerda que ese niño que sufrió, y que no pudo defenderse ya no existe.
Mira la transformación que tenemos ahora gracias eso.
¿Eres feliz querido ego?
Gracias por entender, pero ya no necesito de tu protección, no necesito que pienses por mi, por qué la vida es mi protección.
Yo soy vida al igual que tú, pero en otra dimensión.
En nuestra alianza está el poder de transformar nuestro mundo.
Solo somos tu y yo. Nadie más.
Respira más, hazlo por mí, respira vida.
Céntrate y enfócate.
¿Qué quieres ser realmente querido ego?
Allí radica nuestra paz.
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