POR: ALVARO CORTES
Ayer oficialmente terminó el diálogo entre México y Estados Unidos para llegar a un acuerdo comercial… pero como el asunto desde hace varios días quedó planchado (desde el 27 de agosto, para ser exactos) y sólo hay que esperar a que el documento oficial sea presentado al Congreso estadounidense el próximo 30 de septiembre (con o sin Canadá), Donald Trump no agregó más que alabanzas al acuerdo conseguido.
“Hemos logrado una conclusión con México. Tenemos un maravilloso acuerdo para las dos partes, el lugar de un acuerdo desigual. Tenemos un buen acuerdo para las dos partes, estoy contento por eso”, señaló el republicano en rueda de prensa en la que tenía junto al presidente de Polonia, Andrzej Duda… pero prefirió hablar por un rato del futuro mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador. “Creo que vamos a tener muy buena relación, veremos”, indicó el presidente estadounidense tras dar a conocer (otra vez) que ha sostenidos conversaciones telefónicas con el tabasqueño, las cuales han sido “tremendas”.
Pero bueno, no todo es felicidad en lo que respecta al TLCAN. Como seguramente recuerdan, Canadá no se ha doblegado a los manchados caprichos de Trump… digo, no ha mostrado las ganas de renegociar que mostró México y, por ello, todavía se encuentra en “veremos” su inclusión en el acuerdo comercial. Esta situación tiene notablemente acongojado al inquilino de la Casa Blanca que, cual novio golpeador, indicó que Estados Unidos “quiere a Canadá”… pero si no se porta bien con ellos, ¿pues así cómo?
“Queremos a los canadienses, pero están en una postura que no es buena para ellos. No pueden continuar cobrándonos tarifas de 300% en productos lácteos, y eso es lo que están haciendo”, aseguró Trump al acusar que los liderados por Justin Trudeau sacan ventaja de la relación comercial que tienen con Estados Unidos… tal como lo hacen China y la Unión Europea, a quienes ha castigado con millonarios aranceles a sus productos. Más notorio el caso del país oriental con quien ya se sostiene la llamada “guerra comercial”.
En fin, se espera que la canciller de Canadá, Chrystia Freeland, viaje a Washington para reiniciar las redifíciles renegociaciones y, así, rematar el acuerdo comercial. Ya sea para dejarlo bilateral (México-EEUU) o dejarlo como está desde inicios de la década de los 90: México-EEUU-Canadá.