LA NACION
Todos esperaban el lunes por la tarde a Lionel Messi en el predio que Newell’s tiene en Bella Vista, en las afueras de Rosario. Pero nunca llegó para presenciar el primer partido que disputó su hijo Thiago en la Argentina con la camiseta de Inter Miami y, casualmente, contra el club en el que su papá dio sus primeros pasos como futbolista y del que es hincha. ¿El contexto? La primera fecha del grupo A de la décima edición de la Newell’s Cup para la división 2012.
El astro se quedó en el país luego de participar del triunfo de la selección argentina sobre Perú 1 a 0 en la Bombonera por las eliminatorias sudamericanas e inició sus vacaciones porque ya terminó su participación en la temporada 2024 de la Major League Soccer (MLS) con las Garzas al ser eliminado por Atlanta United en la primera ronda de los playoffs de la Conferencia Este. A sabiendas de la incursión del equipo U13 de la franquicia estadounidense en el certamen organizado por la Lepra con su hijo en el plantel, se instaló con su familia en su ciudad natal para seguir desde cerca la primera vez del mayor de sus descendientes en las primeras canchas que lo vieron brillar con una pelota en sus pies.
En el predio que lleva el nombre de Jorge Griffa no fueron pocos los niños y adultos que se prepararon para que el campeón del mundo les firme un autógrafo o acepte una foto. Estaban ansiosos por verlo y la única certeza que había era que el fin de semana el ‘10′ estuvo allí presenciando un entrenamiento de Thiago con Inter Miami. Pero el ‘precio de la fama’, y de la gloria le impidieron acompañar a su hijo en un día especial para la familia. Claro está que, con su sola aparición por el complejo deportivo, hubiese eclipsado el torneo y, probablemente es lo que quiso evitar, al menos en el arranque del mismo con desfile de las delegaciones incluido.
Sí lo hicieron otros integrantes de la familia: su esposa, Antonela Roccuzzo, y el menor de sus hijos, Ciro, junto a los padres de Lionel, Jorge y Celia Cuccittini. Todos observaron el entretenido encuentro desde la zona de palcos de una de las canchas de fútbol que tiene el polideportivo, en compañía de la pareja del uruguayo Luis Suárez, Sofía Balbi, porque su hijo Benjamín también integra el equipo U13 del conjunto norteamericano.
Thiago Messi, de 12 años, se posicionó en el mediocampo, en un doble ‘5′ junto a Manuel Yarur, pero más suelto. Su actuación fue al compás de su equipo. En gran parte del primer tiempo el Rojinegro fue un monólogo, dominó todas las facetas del juego, e Inter Miami ni siquiera cruzó la mitad de la cancha. Con una notable diferencia física, el local generó varias situaciones para abrir el marcador y chocó siempre contra el arquero Paxton Jakymec. Pero la opción mas clara la tuvo el visitante: Yarur recuperó la pelota en ofensiva y se fue mano a mano con el arquero Santino Vojvoda -hijo del exzaguero de Newell’s y hoy DT de Fortaleza, de Brasil-, quien se quedó con el remate.
De a poco el duelo se equilibró, aunque siempre Newell’s prevaleció por su ventaja en la contextura física de sus jugadores. Thiago, que hasta entonces había tenido que correr a los rivales para tocar la pelota, no escatimó esfuerzos, participó en la distribución para sus compañeros y lo hizo con criterio hasta que fue reemplazado a los 11 minutos del segundo tiempo -se jugaron dos tramos de media hora-.
Quien estuvo un rato más en la cancha fue Benjamín Suárez. Ubicado de centrodelantero, al igual que su papá, también ausente como Lionel Messi a pesar de que había estadio en el predio días atrás; tuvo que lidiar con la envergadura de los defensores rivales y luchó más de lo que pudo jugar, sobre todo en el comienzo, cuando su equipo no conseguía la pelota.
Sin Thiago y Benjamín, el conjunto argentino encontró lo que mereció mucho antes: el gol. Tras un centro al área desde la derecha, la pelota quedó boyando en el área entre varios futbolistas. Ningún defensor de Inter Miami la pudo despejar y Tomás Fantín remató. El balón dio un un oponente, se elevó por encima del arquero Jakymec y entró.
Inter Miami volverá a jugar este martes a las 9.30 vs. Peñarol ‘91. Luego, lo hará el miércoles a las 18 frente a Montevideo City Torque. Todos los partidos se transmiten en vivo por el canal de You Tube de la Newell’s Cup y no se descarta que Lionel Messi asista en alguna oportunidad, amparado en que las expectativas por su presencia no van a estar tan en auge como este lunes a raíz de su ausencia.
La Newell’s Cup es un tradicional torneo para divisiones inferiores organizado por la institución rosarina por el que, desde que se inauguró, pasaron miles de niños de la Argentina y otros países. La edición en curso cuenta con ocho equipos divididos en dos grupos. En el A, además del anfitrión e Inter Miami, están Peñarol ‘91 y Montevideo City Torque, ambos de Uruguay. En la zona B compiten Peñarol ‘09, Universitario de Perú, Colón de Santa Fe y Estudiantes de Río Cuarto. Los dos mejores de cada una avanzarán a las semifinales y, luego, a la definición programada para el próximo viernes 29.
En el caso de las Garzas es la segunda vez que participan, porque lo hicieron el año pasado con la categoría 2011 en la séptima edición. En aquella ocasión lo hicieron con otro equipo en el que no estuvo Thiago, según explicó en la conferencia de prensa de presentación del certamen el entrenador del plantel U13, Gibrán Tevar: “Esta es mi segunda edición, me toca vivir una nueva experiencia con este grupo y tengo la curiosidad de cómo nos va a ir porque es un grupo diferente al del año pasado. Es importante saber que nosotros, en los Estados Unidos comenzamos la temporada ahora y este torneo sirve para prepara el equipo. El grupo del año pasado, con la experiencia vivida, sirvió para armar el equipo”.
En la antesala del arranque de la Newell’s Cup se hizo la presentación en un hotel de Rosario con los entrenadores de todos los clubes participantes y, también, jugadores. No participó Thiago Messi y el representante de su plantel fue el capitán Romeo Rodríguez. En la misma, el director del campeonato, Francisco Pochettino, habló sobre la relevancia del campeonato y sostuvo que los clubes que compiten le realzan el valor: “Este torneo para nosotros es importantísimo y estamos contentos con los clubes que nos visitan porque nos jerarquizan un montón. Se está creando una competencia muy importante e inspira a los chicos a esforzarse y estar bien. El mensaje para los chicos es que disfruten mucho, que estén tranquilos, hagan muchos amigos y que busquen aprender cada vez más los valores que da el fútbol”.