Tabasco y López Obrador: el ingrato abandono de su propia tierra
Lenin Nelson Rosales Córdova
Al poder ejecutivo federal no le importan la pandemia, la inseguridad, la violencia, ni la economía del país, pero sí su publicitado pero inexistente combate a la corrupción, que no ha podido disminuir en los 2 años que ya van de gobierno. Además, ahora el interés central es que Austria regrese o al menos nos dé prestado el “penacho de Moctezuma”, y al parecer en lo inmediato será anunciada la creación del Instituto Nacional para Devolver al Pueblo el Penacho (INDPP) y, tendrá toda la atención para ser resguardado por el Ejército, la Fuerza Aérea, la Marina, la Guardia Nacional, y un velador, para evitar que el “ladrón de bodegas de Ixtapaluca”, (por cierto anda suelto, y mismo que robo 20 máquinas para realizar diálisis a niños con cáncer, con un valor de 5 millones 146 mil 800 pesos), expresó López Obrador en una de sus mañanera.
Hay más: el presidente Andrés Manuel López Obrador, en otra mañanera, solicitó que el reino de España y el Estado Vaticano “pidan perdón por genocidio de hace más de 500 años”; tal parece que el presidente está muy ofendido por un suceso ocurrido 500 años atrás, pero no se ha preocupado y mantiene en el olvido lo que está sucediendo en el sureste mexicano, en donde se inundaron miles de viviendas humildes, como en Tabasco, en donde fueron afectadas más de 700 mil familias.
Con antelación, el Servicio Meteorológico Nacional anunció lo devastador que podría llegar a ser la tormenta “Gamma”, sumado al mal funcionamiento del desagüe de la presa “Peñitas”, y sin embargo, las autoridades federales y estatales hicieron casi nada para salvaguardar la integridad del pueblo de Tabasco. Hay una concepción distorsionada de lo que es prioridad. Mientras, se ve a nuestro presidente dando manotazos y gritos porque nos regresen el penacho, mantiene en el olvido a los afectados (que, por cierto, son sus paisanos). Hace algunos días circulaban videos tomados en el Congreso de la Unión, en los que se veían a los legisladores de MORENA festejando el triunfo que tuvieron al haber votado a favor de desaparecer varios fideicomisos, como el FONDEN, que estaba destinado para poder aplicar recursos a zonas que hubieran sido devastadas por desastres naturales, como en esta ocasión en Tabasco; y sin embargo, a pesar de que estos desastres naturales se repiten año con año, MORENA ha asestado un duro golpe a las familias más vulnerables, que son quienes los sufren.
El pueblo de Tabasco y de todo México necesita abrir los ojos, y darse cuenta de que MORENA y la 4T no son la alternativa de México, no son un partido de izquierda preocupado por el sufrimiento del pueblo mexicano, son buitres carroñeros interesados en el poder, ese es su único interés. No hay unidad en MORENA, hay peleas internas por posicionamientos, hay corrupción, hay nepotismo. Todo eso que dijeron que acabarían, sigue flotando a sus anchas en su interior. La única salvación del pueblo, entonces, es organizarse en el
Movimiento Antorchista, una organización bien estructurada, que desde hace 46 años trabajo al lado del pueblo. Aquí está Antorcha, con los brazos abiertos y dispuesta a encabezar la lucha de los mexicanos humildes y honrados que pugnan por una sociedad justa y equitativa.