Iván Pirrón Después de su calentamiento previo al juego en Minnesota, Dak Prescott habló con Mike McCarthy y el coach de los Dallas Cowboys decidió que lo mejor era darle descanso a su quarterback titular, que se recupera de una lesión en la pantorrilla izquierda.
Con Prescott inactivo, era turno de Cooper Rush de jugar su primer partido como titular en la NFL y el pelirrojo no decepcionó.
Rush pasó para 325 yardas, con dos touchdowns y una intercepción en el triunfo de los Cowboys, 20-16 contra los Minnesota Vikings.
Amari Cooper, un wide receiver criticado por solo tener buenas actuaciones cuando los Cowboys juegan en casa, tuvo anoche un juego espectacular: 122 yardas y el touchdown de la diferencia, a 51 segundos del final.
Sin embargo, es la defensiva de Dallas la que merece todo el crédito de este valioso triunfo.
Los Cowboys solo permitieron 278 yardas a Minnesota, incluidas 78 por tierra a Dalvin Cook; los Vikings se fueron 1-13 en terceros downs y Randy Gregory volvió a mostrar su nivel de All-Pro.
La última vez que Dallas permitió un 7.7% de efectividad en tercer down fue en 2013, contra los Rams.
Gregory estuvo encima de Kirk Cousins toda la noche. Lo capturó en una ocasión y le dio tres de los siete golpes que la defensa de Dallas le propinó al quarterback de Minnesota. Gregory ahora tiene cinco sacks en cuatro juegos.
“La manera en la que respondió la defensa, manteniendo el total de puntos bajo, superando demasiados castigos, particularmente en la última serie, la adversidad, no puedo decir lo suficiente sobre nuestro equipo en las últimas dos semanas o los dos últimos partidos, en New England y esta noche”, dijo McCarthy.
Cierto. Sin su mejor hombre, los Cowboys encontraron la manera de derrotar a un equipo con muchas armas a la ofensiva, como Adam Thielen, Justin Jefferson y Cook, entre otros.
Thielen, quien anotó el único touchdown de los Vikings en la primera serie ofensiva de la noche, fue limitado a 6 recepciones y 78 yardas; Jefferson apenas atrapó dos balones y sumó 21 yardas.
A la lista de lesionados de Dallas hay que agregarle al tackle izquierdo Tyron Smith (tobillo), al linebacker Jabril Cox (rodilla) y al cornerback Trevon Diggs (pie).
La buena noticia es que hay confianza en que Dak Prescott podrá jugar la siguiente semana, cuando Dallas enfrente a los Denver Broncos.
Los Cowboys han ganado seis en fila y su única derrota fue en la Semana 1, en casa de los campeones Bucs y por una diferencia de dos puntos.
¿Es Dallas el mejor equipo de la NFC?
Si esa defensa mantiene ese nivel, creo que los Cowboys tienen argumentos para ser considerados el equipo a vencer en la Conferencia Nacional.
Tampa Bay, los Rams, Arizona y Green Bay son los otros contendientes en la NFC, pero Dallas puede vencerlos, porque este equipo ha mostrado dos virtudes importantes: resiliencia y que no tiene “Prescott-dependencia”.
HOW ‘BOUT THEM COWBOYS?