Soen, Un Viaje por la Nostalgia
Eduardo Arredondo Delgado
Los escandinavos, Soen manifestaron y dieron claves para comprender algo de la Suecia agria, la del alcoholismo, depresión pero también el brillo de la esperanza y es lo que precisamente transmitieron en su presentación.
Su música etérea, de ida y vuelta por los confines de la nostalgia conmovió a los asistentes que se dieron cita el pasado martes en el Salón Pistoleros.
No hubo slam ni nostalgias. Y sin remiendos, Soen en su mejor momento sembró la semilla del futuro de un metal progresivo de primera manufactura.
Antes y después la banda disfrutó de tacos al pastor, probablemente recomendados por el baterista de origen uruguayo, Martín López, ex integrante de Opeth.
Sus temas con claras y notorias influencias de Tool, no los minimizaron sino son parte de una escuela de una corriente que se contagia. Así Soen interpretó temas clásicos de su discografía en poco menos de veinte años.
Fue “Antagonist” una de las piezas que llevó a la audiencia por un viaje melancólico, triste pero paradójicamente lleno de esplendor e inspiración.
Pulcros en sus interpretaciones, Soen se dedicó a ofrecer un recital distinto a otras agrupaciones contemporáneas, persuadiendo a la asistencia que la producción de Suecia no solo es Deat metal o subgéneros emparentados.
Probablemente “Ilussion” sobresalió y la pieza fue coreada desde todo el inmueble del Pistoleros, quienes hipnotizados se dejaron llevar por la propuesta de Soen, en su primera visita a Chihuahua. Recordaron parte del videclip, donde un papá no sabe cuál camino debe de tomar y explicárselo a su hija en una sociedad apocalíptica.
El cantante Joel Ekelöf portando gafas oscuras, cachucha y chamarra no dudó en reconocer la importancia de México y prometió venir una y otra vez, haciendo alusión a que hay que “picar piedra” en la carrera musical.
Cerraron con Lotus y casi el público no los quería dejar ir, pero era hora de la conclusión de Soen.
Regresaron solo para despedirse portando una bandera de Suecia y hasta algunos fans tuvieron la fortuna de tomarse una foto y hasta recibir un autógrafo.
Fotos Eduardo Arredondo