Para llegar al Mictlán tenían que pasar por nueve dimensiones; nueve pruebas
Los mexicas tenían la cosmovisión de que la muerte era la continuidad de la vida y de acuerdo a la manera de morir tenías un lugar en algún paraíso a lado de un Dios o en inframundo, con los de abajo.
El mundo subterráneo, el submundo, el mundo inferior, el infierno, no importa como sea conocido, de igual manera corresponde al tercer plano mitológico del universo primitivo indígena: el reino de los muertos, la región de las sombras.
El concepto que tuvieron nuestros indígenas del pasado acerca del trasmundo era diferente al de ahora, los mexicas sabían que la muerte era parte de una continuidad de la vida y la finalidad última de esta concepción.
Para esta civilización, la muerte era parte del orden cósmico vital, en donde Mictlantecuhtli (Dios de la muerte) y a Tezcatlipoca (Dios de la vida) mantenían este ciclo. La manera de morir era el indicativo del destino que de deparaba al alma, la cual transitaba en lugares determinados según los dioses.
De acuerdo a Sahagún Fray Bernardino en su escrito Historia General de las Cosas de Nueva España, existían diferentes paraísos donde reinaban dioses que tenían relación con la manera de morir, a continuación te contamos cada uno a detalle.
Omeyocan
Era el lugar donde habitaba el sol, el cual se consideraba un guerrero que liberaba cada día una batalla, para los mexicas, perder la vida en la guerra era la mejor forma de morir y éste era su cielo.
A este lugar también iban las mujeres muertas en parto,a los cuatro años de haber muerto se convertían o reencarnan en inmortales aves y se alimentaban con el néctar de las flores en los jardines del Tonatiuhichan (Casa del Sol), además que podían descender a la tierra.
Tlalocan
el paraíso de Tláloc;, el dios de la lluvia, es un lugar, lleno de alegrías, sin penas, en donde nunca faltaban las mazorcas de maíz, las calabazas, chiles verdes, jitomates, frijoles y flores, lleno de vegetación, animales e insectos pequeños parecido a un paraíso terrenal. Aquí iban quienes morían por alguna situación relacionada con el agua.
El Chichihuacuauhco (el lugar para los niños muertos)
El Chichihuacuauhco era un espacio para los niños que tenían una edad menor al primer año, éste lugar nacen árboles nodrizas, con senos maternos como frutos, de los que brota leche, aquí es en donde los pequeños esperaban volver a la tierra cuando se destruyera la raza que la habitaba.
Mictlán (Inframundo)
A éste mundo, llegaban todas aquellas personas que fallecían por muerte común o por causa de un accidente, lo que indicaba que no habían sido elegidos de una manera especial por los dioses. El Mictlán, era un lugar oscuro, denso, bajo, en donde las almas deben realizar pruebas para poder resurgir, y para eso se debía cruzar un camino compuesto por nueve casas o dimensiones, que corresponden a los estratos del inframundo.
Chicunamictlan
Aquí, las almas encontraban el descanso anhelado. El Chicunamictlan, es donde se pasa por la “muerte segunda”. Y de acuerdo a los mexicas, el alma puede descansar ingresando a la naturaleza nuevamente.