LA NACION
Netflix no deja de sorprender con su amplio catálogo. Suspenso, romance, terror, acción, infantiles, historias reales, documentales, producciones clásicas y hasta estrenos, todas tienen su espacio dentro de la plataforma; pero esta vez, una serie de comedia es la que se llevó toda la ovación.
El jueves 26 de septiembre, desembarcó en el gigante del streaming Nadie quiere esto y, en cuestión de horas, se convirtió en una de las favoritas de varias generaciones. La ficción estadounidense tiene 10 capítulos y retrata la historia de Joanne, una agnóstica presentadora de pódcast, y Noah, un rabino poco convencional que acaba de terminar con su pareja, quienes se conocen en una fiesta. Se van del lugar juntos y, a pesar de sus diferencias, perciben que hay algo entre ellos. Pero también se dan cuenta de que hay muchas cosas que podrían interponerse en su romance, como sus perspectivas opuestas de la vida, los desafíos de las relaciones modernas y las intromisiones de sus familiares -incluidos Morgan, la hermana de Joanne, y Sasha, el hermano de Noah-.
“Una nueva serie de enredos sentimentales de ambientación urbana y contrastes entre personas creyentes y ateas. No reinventa el género, pero ofrece un entretenimiento simpático”; “La alegre comedia romántica de Kristen Bell y Adam Brody es tan divertida como When Harry Met Sally (…)”; “Se centra en una visión alternativa del tema de los polos opuestos (…) También invita al público a subvertir sus expectativas sobre la pareja o la relación ideal” y “La apasionante comedia romántica en streaming que todo el mundo lleva años deseando, o al menos todos los que vieron y se desmayaron viendo la segunda temporada de Fleabag”, fueron solo algunos de los comentarios de los críticos de cine que generaron aún más expectativas para los suscriptores de Netflix.
Otro de los motivos por los que revolucionó a los fanáticos es que se trata de la historia real de Erin Foster, la propia creadora. “Esta serie se basa en la única buena decisión que he tomado: enamorarme de un buen chico judío. Pero me di cuenta de que ser feliz es mucho más difícil que ser miserable, no hay nada de que quejarse. Así que creé esta serie basándome en todas las formas en que encontrar a la persona adecuada puede ser tan difícil”, explicó en declaraciones para Netflix.
Y aclaró: “La serie no está haciendo ninguna declaración política porque yo no soy la persona para hacer esa declaración. No crecí siendo judía, me convertí de adulta. Quería contar una historia judía, pero desde la perspectiva de alguien que eligió el judaísmo”.
Reparto de Nadie quiere esto:
- Kristen Bell es Joanne: la protagonista que tiene un podcast y es agnóstica.
- Adam Brody es Noah: el protagonista, un rabino poco convencional.
- Justine Lupe es Morgan: hermana de Joanne.
- Timothy Simons es Sasha: hermano de Noah.
- Jackie Tohn es Esther: la mujer de Sasha.
- Michael Hitchcock es Henry: padre de Joanne y Morgan.
- Paul Ben-Victor es Ilan: padre de Noah.
- Sherry Cola es Ashley: amiga de Joanne.
- Shiloh Bearman es Miriam: hija adolescente de Sasha y Esther.
- Stephanie Faracy es Lynn: madre de Joanne y Morgan.
- Tovah Feldshuh es Bina: madre de Noah.
- Emily Arlook es Rebecca: la novia de Noah, quien espera ansiosa la propuesta de casamiento.