Saxon: ¿Poder, Gloria y olvido?
Este viernes 01 de diciembre la banda británica se presenta en el Salón Pistoleros
Eduardo Arredondo Delgado
Reinaron cuando eran pioneros de la New Wave British Heavy Metal (NWBOHM) en la década de los setenta. Saxon contribuyó a engrandecer el género y después frente a las décadas posteriores y advenimiento de subgéneros y una industria mezquina, quedaron a merced del tiempo y a su destino, casi olvidados como una banda casera.
Hoy, 01 de diciembre la banda británica se presenta en el Pistoleros, luego de una ausencia de más de 15 años en Chihuahua capital; en aquel momento llegaron a un inmueble horroroso, marchito y su actuación fue una irrisoria presentación- durante la promoción del álbum Metalhead- de quizás menos de una hora para luego darle el lugar a un cantante, El Lobito de Sinaloa.
Aquí cierran una pequeña gira por México (antes actuaron en Guadalajara y Monterrey) después del ocaso y fraude del festival que se llevaría en la ciudad de México: Live After Death Horror Fest (un promotor acusado de múltiples fraudes).
Saxon culminó una nueva producción en estudio en su haber: “Hell, Fire and Damnation” cuyo álbum mantiene el estandarte habitual de la agrupación inglesas.
Para esta gira, Saxon no contó la participación del guitarrista, Paul Quinn (¿razones de cansancio o pleito?) y su lugar fue tomado por Brian Tatler- conocido por ser miembro de Diamond Head-.
El cantante, Biff Byford, pasó por una crucial cirugía de corazón y retomó el camino. No podrían hacer otra cosa y es posible que prefieran morir en une escenario, se cansarían de ver llover y comida mala de Inglaterra.
En su biografía, “Never Surrender” (or Nearly Good Looking) Byford menciona los años estériles, putrefactos de la ministra, Margaret Thatcher, cuyos mandatos dejaron una amplia y magra huella, principalmente en la clase trabajadora. Una de sus acciones polémicas fue el privatizar empresas públicas y extrañamente fue reelegida para encabezar un tercer mandato.
Por más de cuarenta años, Saxon se ha mantenido como un referente del metal.
Y a diferencia de Judas Priest y Iron Maiden, Saxon siguió su ruta solitaria, guardando un perfil muy bajo, porque su música nunca fue comercial y ni intentaron dar gusto a fans que buscaban una mascota o interprendidas campañas de publicidad u escándalos propios entre los adolescentes de la época.
Quizás el fracaso comercial de Saxon, obedezca a que sus integrantes vieron que su desarrollo se centraba justamente en aquellos sueños irreverentes de jóvenes plagados de romanticismo. Otros se prostituyeron por amor al dinero y al poder. Y eso siempre tiene un costo