La alcaldesa panista de la ciudad de Chihuahua, se ha visto obligada, a gestionar un amparo, de acuerdo a la columna escrita por Francisco Garfias para
excelsior
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Comenta que «Javier» la acusa de recibir dinero y operar para su predecesor priista, César Duarte, detenido en julio pasado en Miami, por supuestos actos de corrupción durante su mandato.
Que incluso le sugirió, vía la presidenta estatal del PAN, Rocío Reza Gallegos, que se acogiera al “criterio de oportunidad” —al estilo Lozoya—, para evitar las rejas, asegura la alcaldesa.
Sostiene que el trasfondo del acoso es “Un tema de ego”. Corral se aferra a poner sucesor. Su delfín es el senador Gustavo Madero.
“Trata de abrir expedientes por todos lados y de decirle a Madero, que es su favorito, que se espere, que no negocie nada, que no se siente conmigo, que me va a encontrar algo, que me van a descalificar y que va a ir Madero por default”, asegura Campos.
“Desde el 2016 decía que tenía pruebas para meterme al bote. No lo hizo. En el 18 no lo hizo. Me reelegí dos a uno contra Morena con Andrés Manuel en la boleta. Necesitaba que yo le diera votos para tener cinco diputados locales del PAN, para que Madero fuera senador”, cuenta Maru.
Y más: “Ahora que ya se acerca la interna del PAN y la constitucional del 2021, volvió a las amenazas de meterme a la cárcel. Lo ha hecho públicamente dos veces”, agregó la alcaldesa.
Ya le buscó hasta en la UIF. Tampoco encontró nada. “Sólo falta que revise mis boletas de primaria para ver qué me saca”, remató, mordaz, la alcaldesa.
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