La escultura policroma y articulada de la Virgen de la Soledad, fue restaurada por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia, a través de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural (CNCPC-INAH), en coordinación con el Centro INAH Chihuahua, la Diócesis de Parral, el Gobierno Municipal de Parral y la Secretaría de Cultura de Chihuahua.
En presencia de los responsables de cada área coadyuvante, la mañana de este lunes 5 de diciembre la imagen intervenida fue presentada ante el público y los medios de comunicación en las instalaciones del templo de San Juan de Dios, sitio que la alberga y a donde miles de feligreses acuden para pedir y agradecer su protección y ayuda.
Desde 2021, expertas del INAH acudieron a Parral para realizar una evaluación diagnóstica y determinar los deterioros que tenía esta imagen de valor histórico, religioso, simbólico y patrimonial, así como para saber con exactitud las consecuencias de las últimas intervenciones a las que fue sometida, ya que no se utilizaron los materiales adecuados. Para ello, se realizaron estudios de rayos x, tomografía y calas estratigráficas.
Tras los resultados arrojados, se autorizó la intervención a finales de 2022, la cual tuvo una duración aproximada de un mes, en la que participaron las restauradoras Mildret Armendáriz Menchaca y Angélica Vázquez, de la CNCPC-INAH, así como María Fernanda Manini, de la Secretaría de Cultura de Chihuahua.
El trabajo de restauración de la escultura de madera consistió en la estabilización material y estructural de la virgen, ya que el mayor problema que presentaba era en su brazo derecho, pues el perno que lo sostenía ya no servía: este fue sustituido para garantizar su movilidad. Asimismo, la estructura de lino que vestía y que ya estaba muy desgastada fue rescatada y se le colocó una tela compatible; en cuestión estética, se le retiraron elementos como pestañas, tonalidad de piel del rostro y sombras en los párpados superiores que habían sido utilizados anteriormente para tratar de restaurarla, pero que más que ayudar, perjudicaron por no contar con el conocimiento para ello.
El vicario general de la Diócesis de Parral, Jesús Alfonso Baca, en representación del obispo Mauricio Urrea, agradeció la suma de voluntades y profesionalismo por parte de los representantes del gobierno federal, estatal y municipal, en pro de la recuperación de un bien no sólo religioso sino histórico, que es motivo de veneración y cariño por parte de los parralenses.
Cabe señalar que la Virgen de la Soledad fue coronada en 1943 por orden pontificia como patrona del estado de Chihuahua y de todos los mineros; su festividad se lleva a cabo cada 22 de octubre, día en que sale a peregrinación. Su imagen se encontraba de inicio en la Parroquia de San José y después fue trasladada al templo de San Juan de Dios, donde tras un hecho milagroso presente en la narrativa de los católicos, obtuvo el lugar principal de este recinto sagrado.
Si deseas conocer más, consulta: www.conservacionyrestauracion.inah.gob.mx