AGENCIA
El trabajo de Aaron Paul en la pantalla chica nos ha dejado personajes emblemáticos como el de Jesse Pinkman, de la serie Breaking Bad (que interpretó entre 2008 y 2013) o Todd Chavez, de BoJack Horseman, con el que como actor de voz se ganó nuestro cariño desde 2014 y hasta 2020.
Por eso, no es de sorprender que en la reciente temporada de Black Mirror sea él quien protagonice uno de los mejores episodios (si no es que el mejor), rankeado en el sitio Rotten Tomatoes con una calificación de 90%, y titulado Beyond the sea.
Ambientado en una realidad alterna en 1969, la historia sigue a los astronautas Cliff Stanfield (Paul) y David Ross (Josh Hartnett), quienes están en el espacio en una misión que les tomará unos cuatro años.
Sin embargo, en esta realidad la tecnología está tan avanzada que son capaces de estar en contacto con su familia a través de androides llamados «réplicas» que son iguales a ellos y viven en la Tierra y con los que pueden conectarse y manejar al «dormir» en unas cámaras construidas en su nave espacial.
Hasta ahí todo bien, pero las cosas se complican cuando *ALERTA DE SPOILER* un grupo integrante de una secta entra en la casa de David y asesina a su familia para después destruir su «réplica», por lo que ya no podrá conectarse con el planeta Tierra.
¿Por qué la actuación de Aaron destaca? Porque en un momento su personaje le presta su «réplica» a David para que pueda conectarse con la Tierra y respirar un poco de aire fresco, así que lo vemos actuando como dos personas diferentes. Sin embargo, pronto nos daremos cuenta de que esa decisión fue un error que puede terminar en una tragedia.
El episodio ya está disponible en streaming junto con el resto de la sexta temporada de Black Mirror.
¿Dónde?: Netflix