Un ataque protagonizado por elementos del Ejército Mexicano dejó un saldo de dos migrantes originarios de Guatemala fallecidos y otros cuatro heridos, al ser detectados cuando eran trasladados en una zona arenosa rumbo al muro fronterizo para ser cruzados de manera ilegal a Estados Unidos.
Los hechos se registraron la noche del pasado lunes en el tramo San Jerónimo-Anapra, a la altura del punto 330 de la franja que hace frontera con Santa Teresa y Sunland Park, en el estado de Nuevo México. Carlos Manuel Salas, dio a conocer en rueda de prensa que ya existe una investigación y que la propia Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) puso a disposición de las autoridades del Ministerio Público a cuatro elementos junto con sus armas de cargo, mientras que un quinto militar se encuentra prófugo.
En relación al conductor del vehículo donde eran transportados los migrantes, también se encuentra prófugo, pero las investigaciones se concentraron en las placas de la camioneta para establecer el domicilio y la identidad del propietario.
El funcionario informó que los lesionados responden a los nombres de Carlos Humberto Rodríguez López, de 19 años; Rigoberto González Chávez, de 28 años, y Selvín Eduardo García Paredes, de 19 años, originarios de Guatemala, así como Raúl de Jesús Hernández Ramírez, de 18 años de edad, proveniente de Honduras.
Los fallecidos son Elvis Enrique Barrientos de la Rosa, de 27 años de edad, y Margarito Canto Juárez, de 45 años, ambos originarios de Guatemala.
En la información emitida por Carlos Manuel Salas se estableció que un grupo de migrantes se desplazaba por una brecha desértica a bordo de una camioneta Ford Expedition, cuando una unidad del Ejército Mexicano comenzó a perseguirlos y disparar en contra de los migrantes.
El fiscal en la Zona Norte señaló que el día de los hechos tuvieron conocimiento de la agresión al filo de las 22:00 horas, cuatro horas después de los sucesos, y de inmediato se envió personal de la Fiscalía General del Estado para apoyar a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, que fue la primera en llegar al sitio.
El titular de la Zona Norte fue enfático al señalar que la evidencia de este caso será de difícil recolección, ya que los disparos que supuestamente efectuaron los elementos militares, fueron varios kilómetros atrás de donde se quedó atascada la camioneta de los presuntos polleros y que es donde se localizó a los fallecidos y a los heridos.
El fiscal subrayó que desde el momento de los hechos se contó con la colaboración estrecha de las autoridades militares, ya que ellos pusieron a disposición a cuatro elementos y sus respectivas armas para poder iniciar las indagatorias.
dos personas fallecidas y cuatro quedaron lesionadas.
Ayer mismo, a través de un chat de comunicación con que cuenta la Guarnición Militar se dio a conocer el siguiente mensaje:
«Buena noche, en relación a una nota donde refieren que personal de la Guardia Nacional posiblemente agredió a migrantes, hasta el momento no se tiene información sobre el particular y se está corroborando la información y por el momento tanto personal del Ejército Mexicano, como de la Guardia Nacional, se deslindan de los supuestos dichos de agresión a migrantes», señaló el mensaje.
Por su parte, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar se limitó a decir que esperará la información oficial por parte de las autoridades correspondientes para poder emitir una opinión.
“Estamos en espera de que nos den el parte oficial, fue un evento donde tuvo que ver la Guardia Nacional, no estamos tan seguros que haya sido un ataque a migrantes o tenga que ver también con quién esté haciendo el tráfico, estamos seguros, entonces vamos a esperar la información oficial para poder dar una opinión”, externó el edil.
Heridos están fuera de peligro
Los cuatro migrantes, tres de Guatemala y uno de Honduras, que resultaron heridos en la agresión armada, recibieron atención médica en el Hospital General de Ciudad Juárez y su salud se reporta como estable.
Los centroamericanos presentaron heridas de proyectil de arma de fuego en miembros pélvicos inferiores (piernas), pero ninguno se encuentra en peligro y durante el transcurso de la mañana de ayer, tres fueron dados de alta.
Sólo continúa un guatemalteco recibiendo atención médica en el nosocomio debido a que presentó una fractura en la tibia izquierda.
Los pacientes recuperados fueron identificados como Rigoberto y Carlos, ambos de Guatemala, así como el hondureño Raúl, 18 años de edad. El paciente que quedó internado fue identificado como Selvín, de 19 años de edad, originario de Guatemala.
Hasta la mañana del martes, las embajadas o consulados de Honduras o Guatemala no habían emitido ningún posicionamiento al respecto de este ataque.
Con información de Liliana Torreso y Salvador Miranda