Se convirtió en la tercera persona más importante de la iglesia anglicana de Reino Unido
Londres (AFP).- Sarah Mullally se convirtió el sábado en la primera mujer obispo de Londres, pasando a ser la tercera persona más importante de la Iglesia anglicana de Inglaterra.
En la catedral de San Pablo, con ocasión del día internacional de las enfermeras, Sarah Mullally, exenfermera, se convirtió en la 133ª obispa de Londres. Conforme dicta la tradición, tocó tres veces a la puerta del Gran Oeste de la catedral con su bastón pastoral.
En el orden jerárquico, es la tercera persona más importante de la iglesia, por detrás de los arzobispos de Canterbury y de York.
En su sermón, habló de los desafíos que enfrenta Londres, como los ataques con cuchillo, e hizo alusión a los abusos sexuales históricos dentro de la Iglesia.
Debemos hablar en nombre del conjunto de Londres, trabajar para combatir la violencia y el crimen que han llevado a las madres a limpiar la sangre de sus hijos de nuestras aceras, declaró.
La ordenación de mujeres obispo fue aprobada por la iglesia anglicana de Inglaterra en 2014 en el marco de una reforma histórica adoptada tras áridas negociaciones entre los que se oponían a esta y los que la apoyaban.
La primera mujer obispo fue ordenada en enero de 2015 durante una histórica ceremonia en la catedral de York.