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Lionel Messi ganó ayer el Balón de Oro para extender su récord a ocho tras cumplir la gran ambición de su carrera: sacar campeón a su país de la Copa Mundial el año pasado en Qatar.
El astro argentino añadió a su colección el único trofeo que se le había resistido en su colosal carrera, y que fue un factor decisivo dentro de una discreta temporada, para sus estándares, con el Paris Saint-Germain.
Messi superó al delantero Erling Haaland, del Manchester City, y al atacante Kylian Mbappé, su excompañero del PSG. Tanto Haaland como Mbappé no pasan de los 25 años.
Al recibir el trofeo, la «Pulga» mencionó de inmediato a la selección nacional.
«A los compañeros de la selección argentina. Hoy puedo estar acá gracias a mis compañeros», dijo. «Esto es un regalo para todo el grupo, toda la gente. No me quiero olvidar de Haaland y de Kylian (Mbappé) por todo lo que consiguieron. Erling tuvo un año increíble y sé que ellos estarán acá en los próximos años. Veo a muchos jóvenes acá y no tengo dudas de que voy a disfrutar de muy buen futbol durante mucho tiempo».
Un año después de que quedó fuera de los finalistas al Balón de Oro 2022 y tras dejar al futbol europeo, Messi recuperó la corona.
Ganó el máximo trofeo individual en el futbol gracias a su extraordinario Mundial. En Qatar, Messi participó en 10 goles de Argentina, con siete anotaciones y asistiendo en otros tres. Marcó dos goles en la final ante Francia.
Pero su última campaña con el PSG fue menos gloriosa. Aunque el equipo extendió su récord al conseguir su 11mo título de la liga francesa, volvió a quedar eliminado en los octavos de final de la Liga de Campeones.
BONMATÍ, LA MEJOR
En las mujeres, la española Aitana Bonmatí se llevó el Balón de Oro tras guiar a su país a la victoria en la pasada Copa Mundial femenil en agosto.
Bonmatí ya había ganado el premio a la mejor jugadora de la UEFA y el Balón de Oro del Mundial femenino. Anotó tres goles y tuvo dos asistencias en el torneo.
Bonmatí ganó superando a la australiana Sam Kerr y la española Salma Paralluelo.
En otros premios, Jude Bellingham ganó el galardón como mejor jugador Sub-21 y Haaland obtuvo el trofeo Gerd Müller al mejor goleador.
El premio Lev Yashin para el mejor arquero fue para Emiliano Martínez. Además de recibir el trofeo, el portero argentino se llevó abucheos del público en el Teatro de Chatelet.
El premio humanitario que lleva el nombre del fallecido volante brasileño Sócrates fue para Vinícius Junior, por su participación en la fundación que estableció para niños de escasos recursos. El astro del Real Madrid se ha comprometido en mantenerse firme en la lucha contra el racismo.