POR JUAN CHAIDEZ AISPURO 
Beirut.- Un video ha viralizado en las principales redes sociales al documentar desde un inusual ángulo la explosión sucedida en un puerto de Beirut, Líbano; se trata de una mujer con vestido de novia que se realiza una sesióno de fotografías cuando se escucha y observa la fuerte detonación.
En las imágenes se puede observar a la fémina posar para la cámara con un vestido blanco y un velo del mismo color que cubre totalmente su cabello, hasta la frente; el encargado del trabajo le hacía unas tomas aparentemente para lo que sería el material audiovisual de su boda cuando ella perdió la sonrisa por el fuerte estruendo.
En ese momento los presentes comenzaron a correr sin rumbo fijo, intentando huir de un fenómeno que hasta ese instante les era desconocido. En el fondo se ve como entre dos hombres intentan ayudar a la novia, mientras la escena se llena cada vez más cono una nube de lo que podría ser una mezcla de humo y polvo.
¿Qué sucedió en Beirut, Líbano?
Una fuerte explosión fue registrada la mañana de este martes en un almacén de la ciudad de Beirut, capital del Líbano, la cual generó una gran onda expansiva que se logró sentir en toda la capital a varios kilómetros de distancia, hasta el momento se habla de aproximadamente 73 muertos y 3,700 heridos.
Se dice que el hecho se dio tras la inflamación de unas 2.750 toneladas de nitrato de amonio estaban almacenadas en un depósito del puerto afirmó el primer ministro Hasan Diab.
«Es inadmisible que un cargamento de nitrato de amonio, estimado en 2.750 toneladas, se halle desde hace seis años en un almacén, sin medidas preventivas. Esto es inaceptable y no podemos permanecer en silencio sobre este tema», declaró el primer ministro durante la reunión del Consejo Superior de Defensa, según declaraciones citadas por un portavoz en rueda de prensa.
Testigos presenciales han señalado a que hubo rotura de vidrios en viviendas a más de cinco kilómetros de la explosión y que los edificios sufrieron daños de diversa consideración en un radio de más de dos kilómetros, afectando seriamente a los barrios céntricos de la capital mediterránea.
