Hay que ser marranos, pero no tan trompudos. En el Congreso del Estado sucede todo lo que le achacaron que hacían en la administración Javier Corral Jurado. Dispendio total de los recursos públicos, una de las legislaturas más grises. Morena ostenta la Presidencia del Órgano Legislativo, pero ellos mismos desconocen a la Presidenta, la Diputada Adriana Terrazas.
A lo anterior hay que sumarle el nepotismo con el que se maneja Judith Estrada Cervantes, jefa de la oficina de Recursos Humanos , quien les puso oficinas a sus dos hijos que no superan los 23 años de edad. Se supone que están de servicio social en el Congreso, pero a los dos jóvenes les pusieron buen sueldo, viáticos y lo que se ofrezca. No queda ahí. Judith Estrada convirtió la oficina a su cargo en guardería ya que su menor niño de 5 años, recorre gritando los pasillos del departamento de personal. Así son los infantes, pero este no es el lugar. Que ni se le ocurra a cualquier empleada llevar a sus niños aunque sea de visita porque abren expedientes negativos. Pero a la jefa del Departamento, que dice ser amiga personal de Maru Campos y que con Mario Vázquez hace lo que quiere, nadie le puede decir nada.
A unos días de que se dio el golpe histórico en contra de la elección de rector en la UACH, Luis Alfonso Rivera Campos, quien ganó las elecciones pero perdió la rectoría por un amparo, aún no sabe que tráiler lo atropelló.
Este sin duda es un duro golpe a los asesores de la Gobernadora Maru Campos, se supone que lo tenían muy bien planeado, todo estaba «planchado» para que Rivera Campos tomara protesta este miércoles 5 de octubre.
Acostumbrados a cometer todo tipo de batidero, el nuevo gabinete estatal, en algunas jugadas se ven con errores de secundaria. Así de frío como se escucha. Les tumbaron la rectoría por no poner atención a los detalles. Cesar Jáuregui es el más afectado con este asunto, él lleva la política interna del Estado. Para ellos está bien echarle todas las culpas al juzgado federal que aceptó el amparo en contra de la elección del rector. Pero, así estarán echando las culpas a otras personas en los próximos cinco años.
Les llueven demandas en la CEDH, a derechohumanistas.
El mundo está al revés. En el Tribunal Superior de Justicia de Chihuahua, existe una dirección de Derechos Humanos e Igualdad de Género, esta oficina y todo el personal que ahí se desempeña vela por las garantías de todos los trabajadores del Poder Judicial.
Para no ir más lejos, Flor Alejandra Corral Requejo, titular de de esta Dirección y su asesora, Ana Bertha Carreón Nevares, fueron denunciadas por violar los derechos humanos de una de sus compañeras.
No pueden creer en el Poder Judicial que esto esté pasando, pero así es. En los próximos días las dos funcionarias tendrán que comparecer ante la CEDH, por haber violentado las garantías individuales de su misma gente. Y sobre Ana Bertha Carreón, parece que hay algunos expedientes en donde se le involucra por su mal desempeño y que dejó en libertad presuntos delincuentes casi confesos.