Necesaria la educación financiera en la juventud, para una mejor vejez
Este 12 de agosto se celebra el Día Internacional de la Juventud, y una de las principales cosas que con frecuencia se viene a la mente al hablar de juventud, se relaciona con la autonomía que en esa etapa de la vida se alcanza para poder realizar cosas que en edades anteriores no. Sin embargo, aunque poco se hable de ello, este periodo de la vida también resulta crucial para la adopción de buenos hábitos y una planeación de la vida adulta.
Según datos del INEGI[1], en México los jóvenes representan poco más del 25% de la población total. Esto significa que, en algunos años habrá más de 30.7 millones de personas adultas. Uno de los grandes retos que enfrentan, implica reflexionar sobre la importancia de tomar acciones para su futuro financiero. Según expertos de Principal Afore, hacerlo desde una temprana edad, donde las oportunidades son relativamente más asequibles, ofrece la oportunidad de actuar con anticipación y prepararse de la mejor forma para llegar a la adultez, de la mano de una buena planeación para el retiro.
Para ello, Principal, especialista en ahorro para el retiro, comparte algunos consejos; con los que sacar un buen provecho de tu juventud para disfrutar tu vejez al máximo puede lograrse de forma más fácil y cotidiana.
Sé consciente de que algún día te llegará, por más que lo niegues
Aceptarlo es sólo el primer paso. Debes entender que llegar a la edad adulta es un proceso natural de la vida humana de la que difícilmente se escapa. Entre más pronto lo asimiles, será mejor para realizar acciones a tu favor. Estás a tiempo para saber que entre más joven comiences con tus planes de preparación y ahorro, mejores serán los resultados. Créelo: llegada tu hora de retiro, lo vas a agradecer.
No dejes tus años más ahorrables sin ahorrar
La importancia que hay en la juventud con relación a este tema, tiene que ver con la capacidad de trabajar y tener ingresos de forma mucho más frecuente. Considera que, junto a tus gastos, ahorrar deberá ser prioridad durante todo este periodo. A través de un plan a tu medida, de la mano de algún experto, fija una cantidad con base en tus metas. Según especialistas de la OCDE[2], lo deseable es que al retirarte puedas hacerlo con una tasa de reemplazo del 70% de tu sueldo. Esto no significa que debas guardar todo tu dinero por ahora, sino hacer un uso estratégico de recursos como tu Afore, que además de proteger tu dinero, te da rendimientos por él.
Diviértete en el presente, prepárate para seguir haciéndolo en el futuro
Piensa en las comodidades con las que cuentas ahora y haz de ellas una constante en tu día a día. La vida no se acaba cuando se va la juventud, pero seguirla disfrutando del mismo modo dependerá solo de ti y de lo que hagas durante ella. Visualiza en dónde quieres estar y piensa que poder hacerlo está hoy en tus manos. A la par que ahorras para ese viaje que tanto has soñado, ahorra la misma cantidad para poder hacer lo mismo cuando tengas más edad. Así, viajarás hoy y estarás garantizando que tendrás los recursos para hacerlo mañana también.
No te olvides de las prioridades
Visualizar tus metas podría ser una buena forma de mantenerte siempre firme para lograrlas. Gasta de forma inteligente, y con un objetivo fijo y provechoso. Probablemente habrá metas que vayas cumpliendo con el paso del tiempo y, frente a ello, saldrán nuevas prioridades: casarte, tener hijos, pagar sus estudios, etc. Sin embargo, al final de ello, no te olvides que tu camino a la vejez seguirá siendo una constante, por lo que prepararte para esto también deberá serlo.
Asegúrate que tus gastos también sean siempre una inversión
El presente está hecho de las decisiones del pasado, y el futuro de las del presente. Asegúrate de siempre realizar compras que puedan significar un beneficio permanente y rentable para tus finanzas futuras. Tu ‘yo’ viejito, será más feliz si decides gastar $100 en un proyecto con beneficio permanente -como una casa, seguro médico, educación, un viaje, un auto- en vez de hacerlo en un café diario.
A partir de ahora, olvídate del ‘ojalá alguien me hubiera dicho esto antes’ y comienza a tomar medidas en el asunto. Nunca es tarde para hacerlo, y cuanto antes lo hagas será mejor.
Probablemente, una de las grandes pruebas que enfrentarás es la disciplina y será contra ti mismo. No te olvides que, para mejorar la situación, siempre existe la opción de acercarte a un experto de Principal, que estará para apoyarte a definir tus metas y a trabajar por ellas; siempre con base en tus oportunidades.