Dos buenos toros de La Quinta, tercero y cuarto, en una corrida en la que Morenito cuajó su toreo enseñando a embestir a un encastado «Peluquín» y De Justo selló una bella faena que pinchó al cuarto.
TEXTO: JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOS: MIKA ZARCAS
Por David Mora entró Morenito de Aranda en la tarde de este sábado 7 de noviembre en la corrida de la Gira de la Reconstrucción que se celebró en Estepona. Se lidió un encierro de La Quinta en un cartel completado por Emilio de Justo.
Un toro noble fue el primero, un animal al que sí le faltaron algunas virtudes pero con el que pudo gustarse Morenito de Aranda; sobre todo, intentó corregir la falta de humillación que el animal tenía. Un animal claramente a menos con el que dejó bellos momentos por la mano diestra, matando de pinchazo y estocada y paseando premio.
«Coquinero», cárdeno oscuro, era el segundo, de 498 kilos de peso al que Emilio de Justo saludó dejando una bella media en el mismo centro del anillo. Buenos fueron los pares de Morenito de Arles y el inicio de faena del extremeño, que dejó un soberbio pase de pecho en ese prólogo. Por la derecha compuso una buena tanda el diestro, siendo más descompuesto el astado a zurdas. No decidió alargar faena, tomando la espada y matando efectivo al animal. Oreja.
De nuevo salieron a relucir las bellas verónicas de Morenito de Aranda frente al serio tercero, un animal serio de estampa al que también quitó por el mismo palo con mucho gusto. El sobresaliente salmantino Pepe Luis Gallego entró al quite con dos verónicas de buen trazo y una templada media. Acortó en banderillas a Andrés Revuelta y a Fernando Sánchez el animal cárdeno. Y a partir de ahí fue convirtiendo el viaje corto del animal el toreo el burgalés, llegando arriba a base de sobar mucho a un animal que sacó virtudes gracias a cómo hizo Morenito que éste se comportase. Dos orejas para el torero y excesiva vuelta al ruedo al animal.
“Ballestero”, de 518 kilos, cárdeno bragado era el cuarto, segundo del lote de Emilio de Justo, al que el extremeño dejó un buen prólogo capote en mano. Y tuvo profundidad y excelente embestida, con menos movilidad pero más clase que su hermano anterior, este animal de La Quinta, al que supo De Justo entender a la perfección. Toro al que dejó bellísimos naturales, sobre todo de mano muy baja y con remates de tanda con encanto, y buenos derechazos. Gran toro del hierro santacolomeño. Por desgracia, no culminó con el acero su labor, pinchando en varias ocasiones al astado.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Estepona. Gira de la Reconstrucción. Corrida de toros. Media entrada del aforo permitido.
Toros de La Quinta, de vuelta el tercero.
Morenito de Aranda, oreja y dos orejas.
Emilio de Justo, oreja y vuelta al ruedo.
