Las autoridades mexicanas realizarán el miércoles una subasta petrolera de aguas profundas, la más grande desde que el gobierno abrió el sector a la iniciativa privada
México, (Yussel Gonzalez/AFP) – México adjudicó este miércoles seis de nueve bloques petroleros de aguas profundas en la primera parte de una subasta en la que participan algunos gigantes mundiales del sector.
Las áreas petroleras están ubicadas en el Golfo de México, frente a las costas del estado de Tamaulipas, en el noreste de México.
La angloholandesa Shell ganó cuatro de los bloques en alianza con la estatal catarí Qatar Petroleum y otro más en asociación con la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex).
Pemex ganó otro bloque concursando por sí misma, mientras que las otras tres áreas fueron declaradas desiertas.
En la subasta, la más grande desde que el gobierno abrió el sector petrolero a la inversión privada tras una reforma de 2014 que puso fin a 74 años de monopolio de Pemex, participan 19 de las 26 empresas que originalmente se habían registrado, entre las que están pesos pesados como Shell y Chevron.
Tras los primeros resultados, restan 20 bloques por ofrecer esta jornada. Todos están localizados en el Golfo de México, con un área total de 65.000 kilómetros cuadrados, según cifras del regulador, y con recursos estimados de 4.200 millones de barriles de crudo equivalente.
En caso de colocarse al menos el 25% de los bloques podrían atraerse inversiones totales por 31.500 millones de dólares, señaló la secretaría de Energía de México previo a las adjudicaciones.
En otras subastas, ha habido una tasa de éxito del 75%.
«Es difícil predecir cuántos bloques se podrían otorgar, pero debería estar en un punto medio entre las expectativas de la secretaría de Energía y las tasas de éxito anteriores», dijo previamente a la AFP Rene Santos, director senior de analítica de petróleo de la firma S&P Global Platts.
Muchas de las empresas participan en conjunto en las subastas con el objetivo de compartir los riesgos y los gastos.
Para Santos la presencia de las grandes petroleras es una señal positiva «tomando en consideración que se requiere tiempo y dinero para participar en la subasta».
«Asimismo, las grandes empresas traen conocimiento en la exploración de aguas profundas y también disposición en gastar grandes cantidades de capital en el caso que se descubran hidrocarburos», agregó.
Sin embargo, los expertos consideran que México compite con Brasil -que impulsa la participación privada en la explotación de yacimientos en aguas profundas- en la atracción de capital para la industria petrolera.
«Brasil en especial es atractivo para las operadoras de aguas profundas», dijo a la AFP Alejandra León, analista de la firma IHS Markit.
Algunas de las compañías que participan en esta nueva licitación, como la británica BP, también compitieron en la reciente subasta de bloques de presal de Brasil de octubre, en la que se licitaron seis de los ocho bloques ofertados.
La subasta del miércoles es la octava que se realiza en el marco de la reforma energética con la que México busca revertir el declive de sus ganancias petroleras.
En 2017, la producción total de la estatal Pemex cayó 9,6%, según cifras de la empresa.
