– Más de cuatro millones debe el PAN de predial
– El PRI, de rodillas frente a la reforma eléctrica
– En Chihuahua simularán una consulta popular
– Dice Domínguez que Maru es gobernadora gracias al PRI
Apenas entró el nuevo Gobierno municipal en funciones y la dirección de ingresos puso en marcha un agresivo programa de recuperación de cartera vencida del impuesto predial, con notificaciones por escrito a domicilio, donde advierten textualmente: propiedad en proceso de embargo.
Domicilios particulares, comercios, oficinas y hasta viviendas del Infonavit, que generan bajas tasas del impuesto predial, recibieron la visita de los notificadores a partir del 8 de septiembre, para obligar a los causantes rezagados a acercarse a la Tesorería municipal a pagar o realizar un convenio para pagos en plazos.
Lamentablemente, ese mismo criterio y prisa por recuperar el predial no se ha visto con morosos como los del comité municipal del PAN, que deben 4.1 millones de pesos por el predial de su edificio sede, localizado en las calles 5 de Mayo y 16 de Septiembre.
El adeudo data del 2012, pero tal parece que a todos los que han pasado por la dirigencia del comité municipal desde aquel año, les ha importado dos cacahuates. Si de hacer efectivos los procedimientos de embargo se trata, el cuartel de los panistas ya debería estar asegurado por los abogados del Municipio, nada más por el monto que se debe y que se sigue acumulando bimestre a bimestre.
Cada presidente de partido que ha pasado por el comité municipal desde el 2012, ha tenido conocimiento del enorme rezago en impuesto predial, pero han evadido su responsabilidad con el argumento de “lo que no fue en mi año, no fue en mi daño”.
Ahora toca el turno al inquieto Joob Quintín de atender el problema, una vez que salga del lamentable estado físico en que lo dejó una yegua desbocada.
En el PRI de Chihuahua comienzan a levantar polvareda los opositores de la dirigencia nacional, por la postura pasiva que han adoptado al no oponerse, en bloque, con otros partidos a la reforma eléctrica que pretende el ejecutivo federal.
Los ataques al líder nacional tricolor, Alejandro Moreno, así como al coordinador de los diputados federales en San Lázaro, Rubén Moreira, están en todos los tonos, pero lo que menos les dicen son traidores y vendidos.
Mientras el tema sube de color en todo el país, porque la estatización de la industria eléctrica significará un retroceso en el uso de energías limpias y lo peor de todo, el encarecimiento de las tarifas que se pagan actualmente, el PAN es el único partido fuerte que le está mostrando resistencia a la reforma, mientras que en el PRI sus dirigentes ya se pusieron rodilleras, con el argumento que irán a una consulta popular para determinar su postura final.
Por ello los disidentes están moviendo sus redes en los estados, para sacudir la polilla del partido que ha dejado las causas sociales por las causas venales.
De esta forma, en Chihuahua comienzan a escucharse las voces de inconformidad de priistas que reclaman la sumisión de sus dirigentes nacionales y la pasividad de los estatales, que solamente siguen las instrucciones del centro, como fieles mascotas.
El dirigente estatal interino del PRI, Alejandro Domínguez, dijo ayer en su visita a Juárez, que antes de tomar una postura en torno a la reforma eléctrica, saldrán a la calle a escuchar a la gente, como si las voces que expresan su malestar en las redes sociales no existieran.
Ese es el pulso que deben tener en cuenta, en principio, para diseñar una verdadera consulta popular en todos los sectores, colonias, fraccionamientos, rancherías, ejidos y poblados de las zonas urbana, rural y serrana, donde se le explique a la ciudadanía los pros y contras de la dañina reforma.
De otra forma será otra simulación como todas las que se han hecho en consultas populares, para hacerle el favor a la 4T en el Congreso de la Unión y aprobar lo que les dicten.
A nivel nacional, la ciudadanía ha manifestado su apoyo al uso de energías sustentables y su rechazo al pésimo servicio que presta la CFE, así como al encarecimiento de la energía.
Ahora resulta que, según el dirigente interino del PRI estatal, Alejandro Domínguez, la gobernadora Maru Campos ganó el pasado 6 de junio por los votos que le aportó el tricolor.
Resulta y resalta que en su visita ayer a la frontera, el buen Alejandro se aventó la volada de declarar que “la aportación de votos que hizo el PRI a Maru, permitió que la elección no se judicializara”.
Según el veterano político, el PRI le dio a Maru entre 75 mil y 80 mil votos y por eso ya es gobernadora. Se recordará que, en la recta final de la campaña por la gubernatura, allá por el mes de mayo, la candidata del PRI Graciela Ortiz, declinó sin declinar en favor de Maru Campos y públicamente pidió a la población votar por la abanderada del PAN, ante el riesgo de que Morena pudiera ganar las elecciones.
Si Graciela no dejó su candidatura y lo único que pidió fueron los votos para Maru, ¿cómo puede Alejandro Domínguez hablar con tal desfachatez de ese número de votos que nadie contó en las urnas, por la simple razón de que era imposible hacerlo?
¿Cómo es que saca entonces ese número, con un margen de error de cinco mil votos, como si se tratara de contar chiles? A lo mejor los priistas que votaron por Maru por recomendación de Chela, pusieron algún símbolo o leyenda a la boleta y, con base en eso, los genios electorales del PRI sacaron los números que ahora, a toro pasado, presume Domínguez.
Es muy probable que Alejandro esté manejando esta falacia, porque busca que Maru compense la alianza, o traición de Graciela, como quiera verse, con posiciones para el ejército de desempleados que todos los días rondan el edificio del PRI estatal.