Agencia EFE
Redacción Ciencia, 15 nov (EFE).- Pasar demasiado tiempo sentado puede perjudicar la salud del corazón, incluso en personas activas, según un estudio que asocia más de 10 horas y media al día de sedentarismo con mayor riesgo de insuficiencia cardíaca y muerte cardiovascular, incluso en quienes hacen ejercicio regularmente.
Esta es la principal conclusión de un trabajo con 89.530 participantes que se publica en JACC, la revista del Colegio Americano de Cardiología, y presentado en las sesiones científicas 2024 de la Asociación Americana del Corazón. Pasar más tiempo sentado, reclinado o tumbado durante el día puede ser perjudicial para el corazón.
El ejercicio insuficiente es un conocido factor de riesgo de la enfermedad cardiovascular, recuerda un comunicado del citado colegio, que indica que las directrices actuales recomiendan más de 150 minutos de actividad física moderada a vigorosa a la semana para promover la salud del corazón.
Sin embargo, los expertos del estudio afirman que el ejercicio es solo una pequeña parte de la actividad diaria total, y las directrices actuales no proporcionan orientaciones específicas sobre el comportamiento sedentario, que representa una parte mucho mayor de la actividad diaria.
Esta investigación examinó la cantidad de tiempo sedentario en el que el riesgo de enfermedad cardiovascular es mayor y exploró cómo este comportamiento y la actividad física repercuten conjuntamente en las probabilidades de fibrilación auricular, insuficiencia cardíaca, infarto de miocardio y mortalidad.
Entre los 89.530 participantes del biobanco del Reino Unido, la edad media era de 62 años y el 56,4 % eran mujeres. Estos enviaron datos de un acelerómetro triaxial de muñeca que captaba el movimiento durante siete días; el tiempo medio de sedentarismo diario fue de 9,4 horas.
Tras un seguimiento medio de ocho años, 3.638 individuos (4,9 %) desarrollaron fibrilación auricular, 1.854 (2,1 %) insuficiencia cardíaca, 1.610 (1,84 %) infarto de miocardio y 846 (0,94 %) fallecieron.
Los efectos del tiempo sedentario variaron según el resultado. En el caso de la fibrilación auricular y el infarto de miocardio, el riesgo aumentó de forma constante con el tiempo sin grandes cambios.
En el caso de la insuficiencia cardíaca y la mortalidad cardiovascular, el aumento del riesgo fue mínimo hasta que el tiempo sedentario superó las 10,6 horas diarias, momento en el que el riesgo se incrementó significativamente, «lo que muestra un efecto de umbral».
En los participantes que cumplieron con los 150 minutos recomendados de actividad física moderada a vigorosa o más, los efectos de la conducta sedentaria sobre los riesgos de fibrilación auricular y de infarto de miocardio se redujeron sustancialmente, pero los efectos sobre el mayor riesgo de insuficiencia y mortalidad siguieron siendo importantes.