A la octava fue la vencida. El Arsenal regresó al fin a cuartos de la Liga de Campeones tras derrotar este martes al Oporto de la muralla defensiva Pepe (1-0, 4-2 en penales), con dos paradas del arquero español David Raya en la tanda decisiva.
Tras la prórroga y la atajada definitiva desde los once metros de David Raya -la segunda del arquero español- ante el brasileño Galeno (autor del gol en la ida, 1-0), los ‘Gunners’ rompieron una racha de siete eliminaciones en octavos en sus últimas siete presencias en la máxima competición europea.
«Obviamente es una sensación maravillosa para mí, primera vez en la Champions League, y para el club al alcanzar los cuartos de final por primera vez en tantos años», dijo Raya. «Uno juega a fútbol por momentos como estos», añadió el portero cedido por el Brentford.
El único gol en el tiempo de juego llegó en el minuto 41 de la primera parte, obra del internacional belga Leandro Trossard, un resultado que equilibraba el 1-0 cosechado en la ida por los portugueses.
– Odegaard vio el hueco en la muralla –
El líder de la Premier League y equipo con más goles marcados en el campeonato inglés, se había visto incapaz de perforar el arco de Diogo Costa durante los 90 minutos de la ida más los 41 que tardó Trossard en igualar la eliminatoria en un Emirates Stadium lleno hasta la bandera y con un tifo en uno de los fondos con la imagen del técnico Mikel Arteta y la palabra en español ‘Vamos’.
Atento y solvente a sus 41 años, el tres veces campeón de la competición y exjugador del Real Madrid Pepe, fue el exponente de un Oporto, dos veces campeón de Europa (1987 y 2004), más acostumbrado que el Arsenal a estas justas al todo o nada, ejerciendo de intimidante mariscal en una zaga que no puso las cosas fáciles a los londinenses.
Así pues fue una genialidad del noruego Martin Odegaard, que vio un hueco donde apenas se atisbaba para filtrar un balón entre los peones defensivos de Sergio Conceiçao que Trossard envió raso y con rosca al fondo de las redes.
En los penales, el capitán Odegaard, el extremo Bukayo Saka y los dos fichajes de esta temporada, Kai Havertz y Declan Rice, ofrecieron a su público la noche con la que soñaban desde hacía casi tres lustros y que llevaba siete años sin escuchar el himno de la Champions en directo.
– ‘Noche mágica’ –
Al igual que en 2010, año de su última presencia en cuartos, el Arsenal apeó a los Dragones lusos después de haber perdido en la ida.
Con la ventaja adquirida en el estadio de Do Dragao, el Oporto tiró de experiencia y oficio, además de la omnipresencia de un incombustible Pepe en defensa, para lograr el llevar el partido hasta el desenlace desde los once metros.
Saka había calentado los guantes de Diogo Costa (13), pero los lusos no se amilanaban y el delantero brasileño Evanilson pudo haber marcado tres minutos después de disparo lejano.
Ya en la segunda parte, el Arsenal mostró más voluntad de evitar los penales y Odegaard, capitán y mejor jugador local, marcó un gol que fue anulado por falta previa sobre Pepe (67).
No volverían a verse más goles hasta la ronda de penales -la primera en la Champions desde la final de 2016 entre Real Madrid y Atlético de Madrid- en la que se agigantó Raya para frustrar a los brasileños Pepê primero y Galeno después, y llevar al equipo de Mikel Arteta al sorteo del viernes entre los ocho mejores equipos en Europa.
«Fue una noche mágica», resumió el técnico vasco de los ‘Gunners’.
bur/iga/pm