La resiliencia
Por: Andrea Montenegro
El mundo en que vivimos no es color de rosa, siempre hay dificultades. La resiliencia es la capacidad que tiene el ser humano para afrontar los problemas y las adversidades de la vida, superarlas, transformarlas y fortalecerse a partir de estas experiencias.
Los padres a menudo se preguntan cómo han de actuar con sus hijos para protegerlos de los contratiempos de la vida. En primer lugar hay que remarcar que no es posible proteger a los hijos de los altibajos propios de la existencia; pero si es posible criar niños con capacidad de resiliencia. Laura Cecilia Aguilar Pineda, titular de área de sicopedagogía en primaria y estudiante de Maestría en Educación; y Rosa Olivia Guerrero Hernández, del área de dirección en secundaria y estudiante de Maestría en Educación, explican el tema.
“Hay de dos, o le huyo al problema o lo enfrento. Y si lo estoy enfrentando es porque desde pequeño, se me están dando las fortalezas desde casa de cómo lo voy a enfrentar y de qué manera es más conveniente enfrentar ciertas situaciones”, comenta Laura Cecilia Aguilar. Todo esto tiene mucho que ver con lo que le transmiten los padres.
Para el padre es cómo voy a enfrentar yo cierta situación y cómo voy a ayudar a desarrollar la autoestima de mi hijo, para que cuando él sea grande, tenga la manera de enfrentarse a todo lo que se le presente.
Para Rosa Olivia Guerrero punto vital es la autoestima. “Y para fomentarla en el pequeño, lo principal, es como padres es brindarle esa confianza. Así el niño va a ir adquiriendo la seguridad para enfrentar todas esas situaciones adversas. Va a sentir la confianza y seguridad de que va a haber alguien que lo va a apoyar a salir adelante de lo que está pasando”.
El padre da esa confianza, pero también está esa parte de como adultos, creer en el niño. Es brindarle esa seguridad de que el padre confía en que puede salir adelante, para que el niño fortalezca su confianza en si mismo y su autoestima. Decirle tu puedes, superaremos esto, si es posible y creo en tu lo podrás hacer.
“Como padre, decir no quiero que me resuelvas el problema como yo te lo estoy diciendo, sino como tú puedas enfrentar esta dificultad”, aconseja Guerrero Hernández.
Y ayudarlo a analizar: ¿Para ti es la mejor solución? ¿Si lo hubieras hecho de tal forma que hubiera pasado? ¿Cómo sería más fácil el camino? ¿Había otra opción? Presentarle diferentes panoramas donde el pueda abrir el abanico de posibilidades para poder salir adelante.
Acciones. Toma en cuenta estos puntos:
– Es necesario crear lasos fuertes en la familia, para respaldarse ante las desilusiones y heridas inevitables Así cuando estén pasando por situaciones difíciles puedan expresar lo que sienten y tengan la capacidad de pedir ayuda.
– Enseña a tu hijo cómo hacer amigos, la capacidad de sentir empatía, de sentir el dolor del otro. Que sea amigo para poder tener amigos.
– Ayúdalo a centrarse en sus puntos fuertes.
– Capacítalo a tomar decisiones.
– Es importante desarrollar su carácter por medio de normas y limites. Así entenderá que no lo puede tener todo y que debe luchar por lo que desea.
– Las personas suelen echar la culpa a los demás de lo malo que les pasa, pero es necesario aceptar la responsabilidad propia.
– Has que ayude a otros, les permitirá superar la sensación de que no pueden hacer nada.
– Hay que hacer actividades que promuevan a alegría y el buen humor.
– Enséñale poco a poco, y conforme a su edad, a cuidar de si mismo
– Enséñale a fijarse metas razonables y luego a avanzar dando un solo paso a la vez para lograr alcanzarlas.