La mentira de Ana Guevara que habría sido destapada por la misma CONADE, por absurdo que parezca
Ana Gabriela Guevara, directora de la CONADE, emprendió una cacería contra los atletas acuáticos desde comienzos de año, todo por defender a Kiril Todorov, expresidente de la Federación Mexicana de Natación, hoy vinculado a proceso por peculado. El punto álgido de ese ataque fueron sus declaraciones en contra de la Selección Nacional de Nado Sincronizado, que tuvo una destacada participación en el Mundial de Egipto y reclamó la ausencia de apoyo por parte del gobierno.
La respuesta de Guevara fue que Conade tenía invertidos 40 millones de pesos en ese equipo y, además, resaltó que había una deuda activa de 2 millones de pesos: “Por mí, que vendan calzones, trajes de baño, Avon o Tupperware… pero ellas y sus entrenadoras son deudoras. Les hemos dado 40 millones de pesos y no los han justificado. El equipo de nado artístico, las atletas son deudoras dentro de la Conade por dos millones de pesos del ejercicio 2016-2018 que no han logrado comprobar”, expresó en mayo pasado a W Radio.
El equipo de nado defendió su postura: dijeron a Radio Fórmula que no contaron con apoyo oficial, y sus gastos tuvieron que ser cubiertos por la iniciativa privada, por el empresario Carlos Slim vía Fundación Telmex. Los indignantes comentarios de Guevara, que reflejaban irresponsabilidad y también clasismo, contradicen la información oficial que la Conade le dio a conocer al Diario Esto.
En una solicitud de información, dicho periódico solicitó los nombres de los atletas que adeudan dinero a la Conade (Recurso de Revisión RRA 9812/23). En el documento de respuesta, no aparecen los nombres de las seleccionadas de nado sincronizado: Nuria Diosdado, Daniela Estrada, Itzamary González, Glenda Inzunza, Joana Jiménez, Luis Rodríguez, Jessica Sobrino y Pamela Toscano.
El documento hace caer en una contradicción total a Guevara: ella dijo que eran deudoras y, de acuerdo con el propio organismo que dirige, no lo son. La información, recalcó Esto, comprendió los ejercicios de los años 2016, 2017, 2018, 2019, 2020, 2021 y 2022. Es decir, comprende el periodo en el que, según Guevara, debían 2 millones de pesos (2016-2018), y también la siguiente etapa, con el gobierno actual, en el que Guevara sostiene que no han justificado 40 millones de pesos.
No tienen deudas registradas. Por lo tanto, nunca hubo un argumento real para negarles los apoyos deportivos, que además ganaron a pulso con esas cuatro medallas obtenidas en Egipto. Aquello representó otra contradicción para la directora de Conade, pues reiteradamente ha dicho que las becas únicamente se otorgan en función de los resultados obtenidos. Y ellas los tuvieron en el Mundial y también en los Juegos Centroamericanos de San Salvador (ganaron nueve medallas: cinco de oro y cuatro de plata)
En junio pasado, un juez federal dio la orden de que Conade devolviera sus becas al equipo de nado sincronizado. No hubo voluntad de Guevara por hacerlo, que hasta el final mantuvo su postura de que no daría dinero pues, según ella, les debían. Todo ha tenido que ser por esa vía, la legal. Del mismo modo lo hizo la raquetbolista Paola Longoria, que ganó en agosto pasado una demanda a la Conade: la dejaron de apoyar durante tres años y argumentaban que debía 1.6 millones de pesos. Su victoria legal representó otro duro golpe a la credibilidad de Guevara.
Y también otros deportistas acuáticos han emprendido una demanda colectiva contra Conade para recuperar sus becas. En septiembre pasado, Luis Jiménez, representante legal de diversos clavadistas, dijo a La Afición que Conade les pidió a los atletas estar afiliados a una federación para poder recibir sus becas. El requisito es ilógico, pues la Federación Mexicana de Natación ya ha sido desconocida también por Conade, tras la vinculación a proceso de su exdirigente, Kiril Todorov —a quien Guevara se empeñó en defender durante meses—. Conade y sus contradicciones, una historia sin fin.