The Weeknd no dudó en usar el vestuario que ha venido exhibiendo habitualmente en los videoclips ligados a su disco ‘After Hours’ El cantante The Weeknd no dudó en usar el vestuario que ha venido exhibiendo habitualmente en los videoclips ligados a su disco ‘After Hours’ para la gran actuación que ofreció ayer domingo en el marco del intermedio musical de la Super Bowl: camisa negra con pantalones a juego y todo adornado con una llamativa chamarra de color rojo.
Sin embargo, la americana en la que se enfundó para su número de la pasada noche, en el que interpretó éxitos tan reconocibles de su discografía reciente como ‘I Feel It Coming’ o ‘Blinding Lights’, era una muy especial que se destacaba de sus predecesoras por un detalle muy particular, la presencia de miles de brillantes cristales incrustados que tuvieron que ser colocados en tiempo récord y con mucho mimo por cuatro costureros elegidos precisamente para tal misión. En total, la tarea llevó unas 250 horas de trabajo en los días previos a tan importante cita con los telespectadores, la cual tuvo lugar en el estadio Raymond James de Tampa, Florida.
El director creativo de la casa de moda Givenchy, responsable de la emblemática prenda, concedió unas breves declaraciones al portal de moda WWD para presumir abiertamente de su creación y, sobre todo, para dar las gracias al astro del pop por haber contado con la legendaria firma para una de las presentaciones artísticas más esperadas del año en Estados Unidos, que congrega -así como el partido de fútbol en el que se enmarca- a más de 100 millones personas frente al televisor.
«Ha sido todo un honor vestir a The Weeknd para su increíble show de la Super Bowl. Para mí, la moda ha de brindar una personalidad única a lo que llevas, y The Weeknd dio vida a su atuendo con su carácter, su energía y su sentido de la moda», explicó orgulloso Matthew Williams sobre la exitosa colaboración entre su marca y el artista canadiense, uno de los más aclamados y súper ventas de los últimos años tanto en Norteamérica como en Europa.