La antorcha olímpica tiene un significado en los Juegos Olímpicos. Te contamos qué es, quién la transporta y todo lo que debes saber de ellascuchamos hablar del fuego olímpico, pero ¿sabes qué es la antorcha olímpica y qué significado tiene? Es todo un símbolo de los Juegos Olímpicos, junto a la bandera y los aros, y tiene una gran historia detrás.
Antes de que comience cada edición de los juegos, el fuego olímpico recorre un trayecto en el cual participan muchas personas y que emociona a gente de todo el mundo. Esta tradición viene desde tiempos antiguos que marca la inauguración de los Juegos Olímpicos.
Primero que nada, la antorcha olímpica es un símbolo que viene desde la Antigua Grecia y que representa cuando Prometeo robó el fuego a los dioses y lo entregó a la humanidad.
¿Por qué se enciende la antorcha olímpica?
En la Antigua Grecia se tenía la tradición de mantener un fuego encendido durante los Juegos Olímpicos; sin embargo, durante muchos años esto se dejó de hacer hasta que en la edición de Ámsterdam 1928 se retomó, aunque fue hasta 1936 cuando se comenzaron a hacer relevos para transportarla.
En aquel año, Carl Diem, presidente del comité organizador de los juegos de Berlín, propuso que la llama olímpica se encendiera en Olimpia y el COI aceptó.
Desde entonces es tradición encender la antorcha en Olimpia y que llegue a la sede donde se realiza la justa deportiva en el pebetero olímpico, pues anteriormente se encendía en el mismo lugar.
La Carta Olímpica establece que la llama olímpica es la que se enciende en Olimpia con la supervisión del Comité Olímpico Internacional (COI), mientras que la antorcha es portable o una réplica aprobada también por ellos en la que se transporta el fuego olímpico.
También establece que ninguna antorcha, pebetero o cualquier cosa que tenga la llama olímpica no podrá utilizarse de nuevo en ningún lugar tras la clausura de los juegos, a menos que el COI lo autorice.
Recorrido de la llama olímpica
Sí, cada cuatro años la antorcha viaja de Olimpia a la sede donde se realizan los Juegos Olímpicos. El recorrido varía según el lugar, pero la llama se enciende en Olimpia, donde mujeres con vestimentas antiguas griegas hacen una ceremonia; de ahí viaja a Atenas, donde llega al estadio Panathinaikó.
A partir de ahí, el país organizador planifica cuál será el recorrido de la antorcha hasta que llega al pebetero olímpico el día de la inauguración. Esto se hace unos meses antes de que empiece la competencia.
Originalmente, el relevo de la antorcha lo hacían atletas, pero con el paso del tiempo se ha permitido que también participen niños, personas mayores o con alguna discapacidad.
Eso sí, una figura conocida es quien enciende el pebetero, que es uno de los momentos más esperados durante la ceremonia de inauguración. Algunos personajes que han tenido el privilegio de encender el pebetero son Antonio Rebollo, Muhammad Ali, entre otros. Aunque fue en México 68 cuando por primera vez una mujer lo hizo: Enrique Basilio.
En la historia de los Juegos Olímpicos modernos ha habido cinco recorridos especiales de la antorcha: el de la paz tras la Segunda Guerra Mundial, el relevo clásico en Roma (que conectó a Atenas y esta ciudad), el de México 68 que representó el viaje de Cristóbal Colón de Europa a América, el de Seúl 88 y el de Atenas 2004 para conmemorar que los juegos sería en su lugar de origen.