JIRONES DE NUESTRA HISTORIA
LA HISTORIA DE ATOTOZTLI, LA PRIMERA Y ÚNICA MUJER TLATOANI QUE GOBERNÓ EL IMPERIO AZTECA; NO SOLO IGNORADA, SINO BORRADA POR LA HISTORIA OFICIAL MEXICANA… ¿PORQUÉ?
Por: José Luis Jaramillo Vela.
Perteneciente a la más alta realeza y nobleza de Tenochtitlán
La Princesa Atotoztli (Pájaro Acuático) II nació en Tenochtitlán en 1410, hija del Huey Tlatoani o Gran Emperador, Moctezuma Ilhuicamina (El Flechador del Cielo), también llamado Moctezuma I ó Moctezuma “el Viejo”, su madre fue la Princesa Chichimecacihuatzin I; dentro del sistema político del Imperio Azteca, la línea sucesoria y la transmisión del poder se llevaba a cabo de forma casi hereditaria y entre varones, de tal modo que de entre sus tres hermanos, el mayor Iquehuacatzin estaba en la línea directa de sucesión.
El Príncipe Iquehuacatzin, dentro de la línea directa de sucesión, ya ocupaba el rango de “tlacatécatl”, que era un rango en donde se le preparaba al individuo para ocupar el puesto de “tlatoani”, digamos que ahí se les preparaba para gobernar el Imperio y no asumir el cargo sin conocimiento alguno; era una de las cosas que distinguían la extraordinaria organización del Imperio Azteca.
Cómo se organizó políticamente el Imperio Azteca
En 1325, el Patriarca Tenoch (Tuna de Piedra), funda la ciudad de México–Tenochtitlan y se asume como “Huey Tlatoani”, o Gran Emperador fundador; pero para poder llevar la fiesta en paz con los vecinos Toltecas y Texcocanos, se dio a la tarea de negociar un pacto que terminó por llamarse “La Triple Alianza” y que fue muy exitoso para la formación y expansión del Imperio Azteca.
En el acuerdo de la Triple Alianza, los Aztecas se comprometían a incluir como parte gobernante del Imperio a los señoríos Toltecas de Tollan (Tula) y Tollocan (Toluca); así como a los señoríos Texcocanos de Tlacopan (Tacuba) y Tlacopayán (Tacubaya), de tal manera que, en el linaje de la línea sucesoria del Imperio, siempre hubiera consanguíneos o descendientes de estos tres pueblos aliados, gobernando el Imperio.
De tal modo que, a la muerte de Tenoch, asume el primer Huey Tlatoani Acamapichtli (El que empuña la Vara), ya con sangre texcocana y casado con la Princesa Tolteca Tezcamiyahuatzin; a la muerte de Acamapichtli, todos los Tlatoanis siguientes eran descendientes de él. Lo sucede en el trono como segundo Huey Tlatoani, su hijo Huitzilihuitl (Pluma de Colibrí), a partir de aquí, los sucesivos Tlatoanis en su linaje ya traen todos, sangre de la triple alianza; lo sucede
como Tercer Huey Tlatoani, su hijo Chimalpopoca (Escudo Humeante); el Cuarto Huey Tlatoani fue Itzcóatl (Serpiente de Obsidiana), quien asesinó a Chimalpopoca e impidió que ninguno de sus hijos gobernara; el Quinto Huey Tlatoani fue Moctezuma Ilhuicamina I, y aquí es donde la sucesión en el Imperio Azteca se pone interesante…
Entra en escena la Princesa Atotoztli II
Por algún motivo que los historiadores no han podido precisar a ciencia cierta, hacia el final del reinado de Moctezuma I, algo sucedió que movió los cimientos de la Triple Alianza; no se ha establecido con certeza si fue debido a las políticas de Moctezuma I, o si los Toltecas y Texcocanos estaban inconformes con su reinado o qué sucedió, pero el caso es que Moctezuma Ilhuicamina comenzó a apoyarse mucho en su hija la Princesa Atotoztli II, en lugar de apoyarse en su hijo Iquehuacatzin.
En este punto, es donde los historiadores ven un poco de luz en el asunto; aunque no han encontrado ningún dato que lo confirme, creen que los señoríos de Texcoco y los Toltecas no veían bien al Príncipe Iquenahuatzin como posible gobernante ni tampoco a ninguno de sus otros hijos, y tal vez por eso Moctezuma I se apoyaba en su hija Atotoztli, pensando en la posibilidad de que lo sucediera, antes de que los otros señoríos pensaran en imponer a otro Tlatoani; la realidad no se ha podido esclarecer, pero esta situación dio pie al reinado de Atotoztli, que no era ninguna improvisada, había sido preparada por su padre.
El Huey Tlatoani Moctezuma Ilhuicamina I, Quinto Emperador Azteca muere en 1469, dejando un Imperio Azteca muy poderoso y extenso, con muchos pueblos y tribus sometidas como tributarias al Imperio, pero por algún motivo que hasta la fecha se ignora, deja una Triple Alianza agrietada y con evidentes signos de inconformidad por parte de los Toltecas y Texcocanos, situación que comenzaba a poner en riesgo al poderoso Imperio.
La Princesa Atotoztli se convierte en la única Cihuatlatoani y se hace cargo de la situación
La Princesa Atotoztli estaba casada con el Príncipe Tezozomoc, hijo del Cuarto Tlatoani Itzcóatl; a la muerte de su padre Moctezuma I, sin mayores sobresaltos se convierte en la primera y única Cihuatlatoani (Mujer Emperadora), así lo indican los “Anales de Tula”, “El Códice Ramírez”, “Los Anales de Tlatelolco”, el “Códex Mexicanus”, el documento “Genealogía de los Príncipes Mexicas”, así como en la “Historia de los Indios de la Nueva España” de Fray Toribio de Benavente conocido como “Motolinía”.
Entre la sociedad de Tenochtitlán, era muy mal visto que las mujeres ocuparan cargos prominentes, se les consideraba ciudadanos de segunda, solo para criar chilpayates o tzilpayatl (bebés), encargarse del chantli o chante (casa) y entre los guerreros era considerado como una falta de respeto, que una mujer se inmiscuyera en asuntos de guerra; sin embargo, Atotoztli libró esos y todos los obstáculos que enfrentó.
Atotoztli y Tezozomoc procrearon tres hijos; Axayácatl (Cara de Agua), Tizoc (Pierna Enferma) y Ahuízotl (Perro de Aguas) y a los tres los integró como parte de su gobierno para que fueran entendiendo como funcionaba el Imperio, porque su plan era que sus hijos la sucedieran en el cargo; muy pronto, todo el Imperio se dio cuenta de la enorme inteligencia, audacia y astucia de Atotoztli y eso le generó un cierto respeto, pero faltaba su gran mérito.
Atotoztli entendió perfectamente el escenario, siempre protegió a sus tres hermanos, pero los sacó por completo del ambiente político del Imperio y con eso ganó simpatías; luego reunió a los Señoríos Toltecas y Texcocanos y con una enorme habilidad política recompuso la Triple Alianza que a fines del reinado de su padre se había comenzado a desmoronar; al mismo tiempo, demostrando un carácter a prueba de todo, reunió a todos los guerreros, habló con ellos y les propuso a su hijo Axayácatl como jefe máximo de los ejércitos, para ella dedicarse a lo político, a lo social y a la atención del Imperio y de los pueblos tributarios.
De esa forma, Atotoztli recompuso la Triple Alianza, demostró ser tanto o más capaz que los anteriores Tlatoanis, pero no le alcanzó, no fue suficiente y la historia oficial de México la borró por completo de los anales de la historia, en una total y sempiterna falta de respeto hacia la mujer mexicana que ha tenido siempre el Gobierno y la Historia Oficial de México; son muy pocas las mujeres que la Historia Oficial de México reconoce en su historia, y algunas de ellas, sin tener los méritos suficientes.
La Cihuatlatoani Atotoztli deja su marca en el Imperio Azteca
Algunas fuentes historiográficas le dan a Atotoztli un reinado de 1469 a 1472, mientras que otras fuentes le dan un reinado de 1469 a 1481; la realidad es que gobernó cuatro años, de 1469 a 1472, tiempo en el que con enorme habilidad y carácter recompuso políticamente el Imperio Azteca y la Triple Alianza, no se inmiscuyó en ninguna guerra, retuvo a todos los pueblos conquistados y concluyó obras de suministro de agua y vías de comunicación en Tenochtitlán.
A su “retiro”, Atotoztli nombra como Huey Tlatoani a su hijo Axayácatl, a quien antes había hecho jefe de todos los ejércitos Mexicas; pero también es la realidad de que ella fue la mano tras el reinado de Axayácatl. Atotoztli fue tan grandiosa gobernante, que en cuatro años recompuso al Imperio Azteca, sin guerras y con infraestructura y con eso tuvo suficiente para que los tres siguientes Tlatoanis, fueran sus tres hijos; Axayácatl, Tizoc y Ahuízotl.
Atotoztli recompone el Imperio Azteca y sus tres hijos son los tres siguientes Tlatoanis
Tras cuatro años, de 1469 a 1472, en los que recompuso todo el sistema político y administrativo del Imperio Azteca, la Cihuatlatoani Atotoztli entrega el poder a su hijo Axayácatl, quien gobernó de 1472 a 1481, siempre bajo la supervisión se su madre Atotoztli; de 1481 a 1486, gobernó su otro hijo Tizoc; y de 1486 a 1502, gobernó su tercer hijo Ahuízotl.
Tal fue el poder y la influencia de Atotoztli, que impuso a sus tres hijos como los siguientes tres Tlatoanis, hasta 1502, y el Imperio Azteca siguió funcionando como el más grande de todo el Continente en esa época, más que el Imperio Inca, que tenía muy buenas rutas de comunicación, pero no tenía organización.
Los últimos Tlatoanis del Imperio Azteca
Después de que gobernaron los tres hijos de Atotoztli, llegó el Huey Tlatoani Moctezuma Xocoyotzin (Motecuzomah Xocoyotzin), (El Señor Fruncido), quien gobernó de 1502 a 1520; él tuvo que recibir y lidiar con Hernán Cortés y los españoles; le siguió Cuitláhuac (Excremento Seco) y por último, Cuauhtémoc (Águila en ataque), Cuauhtémoc fue el último Huey Tlatoani del Imperio Azteca, Hernán Cortés doblegó al Imperio a través de la manipulación a Moctezuma Xocoyotzin y la tortura a Cuauhtémoc.
Los historiadores coinciden en señalar que, si Cihuatlatoani Atotoztli hubiese recibido a Hernán Cortés y su gente, la historia sería muy diferente; no se sabe, son especulaciones, pero lo que no deja lugar a dudas, es que Atotoztli hubiese enfrentado a Cortés de una manera muy diferente a como lo enfrentó Moctezuma Xocoyotzin, tal vez, dada su astucia e ingenio, le hubiese hecho “una oferta que no hubiese podido rechazar”, nunca lo sabremos, pero siempre lo supondremos.
Cihuatlatoani Atotoztli, una gran mujer no solo olvidada, sino borrada por la historia
En la Historia Oficial de México, su nombre apenas si aparece como hija de Moctezuma Ilhuicamina, pero su período de gobierno y sus aportaciones al Imperio Azteca desaparecieron, fueron borrados, junto con ella por la historia, al grado de que en la lista de Huey Tlatoanis del Imperio Azteca, ella no aparece; su nombre y el período de gobierno de Atotoztli debía de figurar entre su padre Moctezuma Ilhuicamina y su hijo Axayácatl, pero no es así, los cuatro años que gobernó, la historia oficial se los adjudica a Axayácatl y a ella la borraron de la historia.
La Historia Oficial de México, muy injusta con la mujer mexicana
La Historia Oficial Mexicana no se caracteriza por reconocer ni a las heroínas, ni a las mujeres mexicanas más destacadas, mucho menos si son indígenas o autóctonas, pero curiosa y sospechosamente eleva a rango histórico a La Malinche, a quien muchos historiadores la ubican como la primera traidora a la patria; sin embargo, sí reconoce a Josefa Ortiz de Domínguez, que ella no era Corregidora, sino su esposo Miguel Domínguez Alemán, o a Leona Vicario, cuyo esposo Andrés Quintana Roo era Corregidor; como ellas, son muy pocas las mujeres que la historia de nuestro país reconoce y así con una serie de errores y horrores históricos que siempre dejan a la mujer mexicana en un plano inferior o de plano borrada de la historia.
Fuentes Bibliográficas:
+ bbc.com
+ mexicodesconocido.com.mx
+ xataka.com.mx
+ repository.uaeh.edu.mx
+ eluniversal.com.mx
+ pueblosoriginarios.com
+ billieparkernoticias.com
+ admagazine,com
+arqueologiamexicana.com.mx
+ es.wikipedia.org