Por Jorge Cantillo
La cantante británica Jesse J fue diagnosticada con el síndrome de Ménière una enfermedad incurable del oído que puede causarle la sordera. Foto: Facebook
La pasada Navidad no fue un día muy festivo y alegre para la cantante Jesse J, una de las últimas grandes promesas del pop británico, pues lejos del habitual ánimo con el que comparte contenido en sus redes sociales, inundadas comúnmente de videos de ella bailando o de fotos sensuales, le contó con sus seguidores cómo tuvo que pasar su nochebuena en la clínica.
El ingreso al hospital no fue un tema menor, por el contrario, Jesse J contó que tuvo que irse de urgencias pues sintió dificultad para cantar, escuchar e incluso caminar en línea recta por lo que intuyó que su a su oído le estaba pasando algo grave.
No le faltaba razón. Los médicos después de examinarla le diagnosticaron síndrome de Ménière, una rara enfermedad incurable que causa severos mareos, un pitido en el oído llamado tinnitus, pérdida intermitente de la audición, una sensación de presión o dolor en el oído y, en sus etapas más avanzadas, sordera.
“Me desperté y sentí que estaba completamente sordo del oído derecho, no podía caminar en línea recta. Básicamente me dijeron que tenía el síndrome de Ménière. Sé que mucha gente lo padece y, de hecho, muchas personas se acercaron a mí y me dieron buenos consejos, así que me quedé en silencio. Ahora es la primera vez que puedo cantar y soportarlo. Extraño mucho cantar y estar cerca de alguien”, dijo la cantante de 32 años a sus fans por medio de su cuenta de Instagram.La arista británica ya había tenido complicaciones de salud en el pasado asociadas a problemas cardiacos. Foto: Facebook
Sin embargo, la vocalista afirmó que mantiene la esperanza de retomar su carrera: “Podría ser mucho peor, es lo que es. Estoy muy agradecida por mi salud. Simplemente me desconcertó. La víspera de Navidad estaba en el hospital del oído y decía: ‘¿Qué está pasando?’ Pero me alegro de haber ido temprano, descubrieron lo que era muy rápido y me recetaron el medicamento correcto, así que me siento mucho mejor hoy”.
Algunas personas que sufren de esta enfermedad tienen ataques que pueden ocurrir sin previo aviso, con intensos dolores y presiones en el oído afectado; otras personas les da ataques de vértigo esporádicos y otras presentar estos síntomas por varios días. Los mareos producto de la enfermedad pueden llegar a ser tan fuertes que impiden caminar, mantener el equilibro o producen caídas en las personas afectadas.Jesse J tiene esperanza de volver a los escenarios. Foto: Facebook
La causa concreta que produce la enfermedad aún es desconocida pero los científicos creen que puede estar relacionada a los niveles de los líquidos en los canales del oído interno o a la mezcla de los mismos. La otra mala noticia es que no hay cura, aunque sí existen medicamentos para tratar los síntomas. En los casos más severos se requiere de un dispositivo para mejorar la audición o incluso de cirugía.
La vida y la carrera de Jessica Ellen Cornish, el verdadero nombre de Jesse J, no ha sido particularmente fácil. En el pasado ya ha tenido sustos de salud importantes, como la arritmia cardiaca que le fue diagnosticada a la temprana edad de 12 años, o el pequeño derrame cerebral que eso le produjo a los 18. Desde entonces ni fuma ni bebe.
Su incursión en el mundo de la música también ha sido accidentada. A los 16 años tuvo su primer contrato discográfico, lo que presagiaba una carrera temprana y exitosa. Sin embargo, Gut Records, la empresa que la firmó para grabar su primer disco, quebró antes del lanzamiento, haciendo que el álbum nunca viera la luz.Jesse J en concierto Foto: Facebook
En 2010 logró posicionar su álbum “Who You Are” en las listas británicas y su carrera empezó a despegar. Su último disco lo publicó en 2018 y aunque se muestra optimista de cara al futuro todavía queda por ver cuánto incidirá el síndrome de Ménière en su carrera.