El día ha llegado, y tras librar campañas, intercampañas, precampañas, y turbo-ultra-recontra-pre campañas, este domingo los mexicanos iremos a las urnas, en lo que es calificada como la elección más grande y más importante en la historia de nuestro país.
Y mientras unos celebran el adiós a los spots innecesarios, otros se ilusionan pensando que la contaminación visual en redes sociales también llegará a su fin, pero, oh sorpresa…
Contrario a lo que muchos pudieran pensar, es precisamente este periodo en donde los bots y las noticias falsas suelen hacer de la suyas, bombardeándonos de mensajes con los que intentarán confundir y manipular la opinión de la ciudadanía, por lo que sobra decir, que hay que ser cuidadosos con lo que creemos, pero aún más con lo que compartimos.
Y es que no olvidemos que más allá de lo que nos cuenten, de las fotos, videos o mensajes de voz que nos manden, siempre debe existir un contexto y sobre todo un hecho verídico y como ciudadanos, también somos responsables de no atentar contra la certeza de esta elección.
No esta de más, pedir que antes de creer, asumir o compartir una noticia, contrasten la misma con diversas fuentes de prestigio, canales de televisión, periódicos de circulación nacional, portales reconocidos o estaciones de radio, que estaremos haciendo hasta lo imposible por compartir todos los detalles de la elección desde el epicentro de la misma.
Curiosamente, las noticias falsas se comparten más que las verdaderas y una de sus características es contenido amarillista y morboso que logra penetrar en los lectores y en muchos casos estos se convierten en difusores involuntarios de las fake news, compartiéndolas de boca en boca. Es cierto que en la política mexicana pasan cosas tan inverosímiles que ya ni sabemos en qué creer, por lo que de nueva cuenta, antes de compartir hay que verificar y asegurarnos de que los hechos sean ciertos.
Y sí, sabemos que la terminología utilizada en estos procesos suele ser un poco confusa y que sin darnos cuenta terminemos confundidos entre las encuestas de salida, el conteo rápido, los resultados del PREP o el computo distrital, así que en este tenor es importante recordar que nadie, más que el INE puede dar a conocer los resultados oficiales de la contienda, y aquí, sí valdría la pena detenerse a revisar el uso y objetivo de cada una de estas herramientas.
Las encuestas son muestras que permiten recoger información sobre las preferencias del electorado, pero los resultados de las mismas no necesariamente son los resultados de las elecciones. Así lo hemos visto en diversos ejercicios electorales realizados en diversas partes del mundo, como Estados Unidos, Reino Unido o más recientemente, Colombia, así que si alguien les presume alguna encuesta el domingo, habrá que revisar la metodología y tomar el resultado con todas las reservas.
Posteriormente, tenemos el conteo rápido, que toma una muestra muy grande de más o menos el 5% del total de casillas instaladas y en donde los datos de las actas de cada casilla se transmiten al INE vía telefónica para que un grupo de estadísticos y actuarios que hay en México procesen dicha muestra, pero el resultado que arroje, tampoco es definitivo.
Por último, está el PREP, que no es otra cosa más que Programa de Resultados Electorales Preliminares -que va generando, poco a poco, información preliminar de los resultados, gracias a los datos e imágenes de todas las Actas de Escrutinio y Cómputo de las casillas del país. Por lo tanto, el sistema avanza conforme se recibe la información, acta por acta, a partir de las 20 horas del 1º de julio y hasta las 20 horas del 2 de julio, es decir dura 24 horas, y en este periodo, los resultados, también pueden cambiar de un momento a otro.
Así que este domingo, antes y después de votar, mantente bien informado pero sobre todo, procura no propagar rumores, situaciones o hechos, que no te consten y de las que no estés completamente seguro.
