LA NACION
Este año, la MET Gala tuvo una gran ausente: Gisele Bündchen. La supermodelo brasileña, que suele engalanar con su belleza la alfombra roja del evento benéfico que da inicio a la exposición de moda anual del Instituto del Vestido del Museo Metropolitano de Arte de la ciudad de Nueva York, pegó el faltazo, a pesar de que se esperaba su presencia. La excusa fue que debía mantenerse en Miami, desde donde venía trabajando incansablemente para ayudar a su estado natal, Rio Grande do Sul, que estaba sufriendo las inundaciones más devastadoras de su historia. Sin embargo, varias fuentes señalaban que el motivo de su ausencia era mucho más privado y delicado.
Esa semana, la modelo que abrió las puertas del mundo a la camada de supermodelos brasileñas, como Ana Beatriz Barros, Adriana Lima y Alessandra Ambrosio, se convirtió, sin haberlo buscado, en el centro de atención y en el blanco de las bromas que le hicieron a su exmarido, el jugador de fútbol americano Tom Brady .
El deportista fue el protagonista de un programa especial emitido por Netflix en el que figuras de la talla de Kevin Hart, Julian Edelman, Kim Kardashian y Nikki Glaser, entre otros, que tenía como único fin hacerle bromas. Según indicó la revista People, luego de la emisión, la modelo se sintió “ profundamente decepcionada por el retrato irrespetuoso de su familia ”. Para ella, lo ocurrido durante el programa fue claramente una campaña de desprestigio en su contra, basada en el sexismo y en un desagradable nacionalismo , a la que, como mínimo, se prestó el padre de sus hijos.
“Gisele se acostó con su entrenador de karate. Tom, ¿cómo no lo viste venir? ¿Ocho clases de karate al día?”, disparó Kevin Hart en un momento del especial The Greatest Roast of All Time: Tom Brady. El humorista también deslizó que el motivo de la separación de Brady y la top brasileña fue su decisión de volver a jugar al fútbol americano luego de anunciar su retiro: “Te merecés la vida de soltero, porque no tuviste elección. Gisele te dio un ultimátum, te dijo que te retires o se acabó. (…) Cuando tenés la oportunidad hacer 8-9 y lo único que podés perder es a tu esposa y tus hijos, debés que hacer lo que carajo tengas que hacer”.
Durante el especial, fueron varias las personalidades invitadas que dejaron entrever que la ruptura había tenido como detonante el romance entre Bündchen con el entrenador de jiu-jitsu Joaquim Valente, algo que ella ya ha negado vehementemente en varias oportunidades, asegurando que una relación comenzó cuando la otra ya se había acabado.
“Cuánto debe apestar para Tom, dios mío, el saber que el nuevo novio de tu exesposa podría golpearte el c… mientras se come el de ella”, fue una de las “bromas” que realizó Nikki Glasser durante la transmisión en vivo, mientras la cámara enfocaba las reacciones de Brady. También expresó que lo único “más tonto” que el atleta hizo fue decirle a Bündchen que “probase el jiu-jitsu”.
Aquel programa, al parecer, no solo alejó momentáneamente a la modelo de 43 años de la vida pública, sino que terminó arrebatándole a su nuevo amor. Según informó Page Six, Bündchen y Valente decidieron ponerle fin a su relación, por las molestas repercusiones del ciclo de Netflix.
Este jueves, una fuente le dijo a InTouch Weekly que, “de repente, se vieron en el centro del foco de atención” y fue “demasiado” para el entrenador de 34 años. “ Joaquim es un tipo normal. No está acostumbrado a los escándalos ni al escarnio público ”, aseguró alguien cercano a la pareja.
Si bien no está claro exactamente cuándo se separaron, Bündchen y Valente no se han mostrado públicamente juntos desde finales de abril. “ Desde que se emitió el programa, Joaquim pasó a ser parte del chiste. De hecho, la gente empezó a preguntarle si él era el motivo de su divorcio. Y él odiaba eso ”, indicó una fuente al medio estadounidense. E indicó que al aceptar que se realizara el programa “Brady le puso un blanco en la espalda de Joaquim”.
Después de la emisión del programa, el futbolista americano intentó desligarse de lo ocurrido, y aseguró que no le gustó cómo su familia – él y Búndchen son padres de Benjamin, de 14 años, y de Vivian, de 11- fue afectada, y aseguró que si pudiera volver el tiempo atrás, no se prestaría a hacerlo. Sin embargo, desde el entorno de la top model aseguran que ella siente que, una vez más, “Brady antepuso su fama al interés por sus seres queridos” y entienden que su intención era, justamente, herir a la madre de sus hijos .