NUEVA YORK.- El expolicía estadounidense Derek Chauvin, condenado por el asesinato en 2020 del afroestadounidense George Floyd, fue apuñalado este viernes en prisión, informó el fiscal general de Minnesota, Keith Ellison.
“Me entristece saber que Derek Chauvin fue objeto de violencia”, dijo Ellison. “Fue debidamente declarado culpable de sus crímenes y, como cualquier persona encarcelada, debería poder cumplir su condena sin temor a represalias o violencia”.
“Una persona encarcelada fue agredida en la Institución Correccional Federal (FCI) de Tucson”, en el estado de Arizona, precisó por su parte la Agencia Federal de Prisiones en un comunicado.
”Los empleados que respondieron iniciaron medidas para salvar la vida de un individuo encarcelado”, que fue enviado a “un hospital local para su posterior tratamiento y evaluación”, explicó el texto.
Chauvin, de 47 años, cumple una sentencia federal de 21 años por violar los derechos civiles de Floyd y una sentencia estatal de 22 años y medio por asesinato en segundo grado. La muerte de Floyd mientras estaba inmovilizado bajo la rodilla de Chauvin durante 9 minutos en la esquina de la avenida Chicago y la calle 38 en el sur de Minneapolis en mayo de 2020 desencadenó días de protestas masivas a nivel local y provocó indignación internacional. Chauvin fue declarado culpable del cargo de asesinato estatal en abril de 2021.
El abogado de Chauvin abogó durante mucho tiempo por separarlo de la población en general para proteger su seguridad. Estuvo recluido en régimen de aislamiento durante más de seis meses mientras estaba encarcelado en la prisión de Oak Park Heights, la prisión de alta seguridad de Minnesota, donde esperaba sentencia. No está claro cuánto tiempo permaneció Chauvin en aislamiento después de ser trasladado a instalaciones federales fuera del estado.
Lo que le ocurrió a Floyd
Los gritos de Floyd de “¡No puedo respirar!”, registrados en un video de una persona que pasaba circunstancialmente por allí, se convirtieron en un reclamo de los manifestantes que salieron a las calles.
La muerte de Floyd contribuyó a impulsar además una importante discusión sobre el racismo y la actuación policial en Estados Unidos y en todo el mundo.
Discusión sobre el racismo
Una investigación posterior del Departamento de Justicia sobre la Policía de Minneapolis, cuyas conclusiones se publicaron en junio de 2023, afirmó que sus agentes recurrían habitualmente a prácticas violentas y racistas, “incluida la fuerza letal injustificada”.
Minneapolis, en el estado de Minnesota, también resolvió una demanda por homicidio culposo interpuesta por la familia Floyd y acordó pagar 27 millones de dólares.
Chauvin apeló su condena por asesinato en segundo grado, pero su recurso fue rechazado por la Corte Suprema a principios de este mes. ”A fin de cuentas, todo el juicio, incluida la sentencia, fue una farsa”, declaró desde la cárcel en un documental reciente.
Pero en la audiencia de su sentencia habló poco, “debido a algunos asuntos legales adicionales que tenía entre manos”. ”Quiero dar el pésame a la familia Floyd”, agregó el expolicía. Por lo demás, permaneció inexpresivo, como hizo durante el juicio, incluso cuando los testigos ofrecieron testimonios contra él.
El abogado de Chauvin, Eric Nelson, había dicho que su cliente “irradiaba un comportamiento tranquilo y profesional” en sus interacciones con Floyd, y trató de convencer al jurado de que el expolicía aplicó una sujeción autorizada y acorde con su formación.
Pero la Fiscalía argumentó con éxito que Chauvin había hecho un uso excesivo de la fuerza, no solo con Floyd, sino con otras personas a las que detuvo durante sus 19 años de carrera.
Antes del juicio, la Fiscalía halló varios ejemplos de su “modus operandi”, incluido el caso de Zoya Code, una joven negra detenida por Chauvin en 2017.”A pesar de que la mujer no se resistía físicamente de ninguna manera, Chauvin se arrodilló sobre su cuerpo, usando el peso de su cuerpo para inmovilizarla contra el suelo”, dijo la fiscalía.
Después del asesinato, sus colegas describieron a Chauvin como un adicto al trabajo, silencioso y rígido, que a menudo patrullaba los barrios más difíciles de la ciudad. Su compromiso con el servicio le valió cuatro medallas a lo largo de su carrera. Pero también acumuló 22 denuncias e investigaciones internas, según un registro público depurado de todos los detalles.
Agencias AFP y AP