La FGR dijo que debido a ello ‘hay elementos suficientes para solicitar una pena condenatoria’
EFE
El exgobernador del estado mexicano de Sonora Guillermo Padrés (2009-2015) enfrenta dos procesos penales, uno por delincuencia organizada y lavado de dinero y otro por defraudación fiscal, informó este lunes la Fiscalía General de la República (FGR).
En un comunicado, la dependencia dijo que debido a ello «hay elementos suficientes para solicitar una pena condenatoria y así lo hará en su momento».
El organismo detalló que el exfuncionario tiene dos procesos abiertos, «uno iniciado en 2014, por delincuencia organizada y por operaciones con recursos de procedencia ilícita; y el otro iniciado en 2016, por defraudación fiscal y también por operaciones con recursos de procedencia ilícita».
Esta aclaración llega luego de que este lunes, durante su conferencia matutina, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, rechazara haber intervenido para que Padrés enfrentara en libertad su proceso por el presunto daño de 30,000 millones de pesos (1,470 millones de dólares) al Estado.
«Ningún acuerdo con él, yo no establezco relaciones de complicidad con nadie. Son otros tiempos, sencillamente no era una asunto de mi competencia, y es que ahora hay, ahora sí, división y equilibrio de poderes», afirmó López Obrador.
El mandatario mexicano señaló que desde que es presidente no ha intervenido para que se castigue a nadie de manera injustificada, ni «para liberar a nadie», zanjó.
En tanto, la FGR detalló que en el proceso iniciado en 2014, un Juez Federal sobreseyó la causa respecto al delito de delincuencia organizada, derivado de un desistimiento expreso de la entonces Procuraduría (Fiscalía) General de la República (PGR), y se continuó con el procedimiento por operaciones con recursos de procedencia ilícita.
«En dicho proceso, en 2018, un juez federal le otorgó al procesado, libertad con medidas cautelares», apuntó.
Y señaló que en este momento procesal, la FGR considera que hay elementos suficientes para solicitar una pena contra el exgobernador, «por operaciones con recursos de procedencia ilícita; y así lo hará en su momento».
En el otro caso de 2016, por defraudación fiscal, la Fiscalía aclaró que en 2018, durante la administración anterior, «un Tribunal Federal determinó conceder al procesado la sustitución de la prisión preventiva, por otras medidas cautelares».
Este último caso, detalló, se presentó ante un juez de amparo; sin embargo, la Fiscalía considera que «hay elementos suficientes» para solicitar sentencia condenatoria contra Padrés, «en razón de las pruebas con las que se cuenta para demostrar el delito de defraudación fiscal equiparado».
En febrero de 2019, Padrés recuperó su libertad después de haber permanecido más de dos años en prisión preventiva bajo la acusación de lavado de dinero y defraudación fiscal.