Fenece el gobierno de Javier Corral sin pena ni gloria, y el pueblo sigue igual
Por Iván Leo Tepatzi Ramírez
A prácticamente dos meses de que el gobierno del Lic. Javier Corral termine, el pueblo chihuahuense se sigue preguntando: ¿qué fue lo que hizo el gobierno en beneficio de las familias chihuahuenses en todo este tiempo? Para dar respuesta a esta pregunta no hace falta quebrarse mucho la cabeza, solo hace falta mirar las condiciones de vivienda en la cual vivimos miles de chihuahuenses, voltear a ver y caminar nuestras colonias, nuestros pueblos, nuestras calles, la falta de servicios básicos, la manera en cómo hacemos llegar los alimentos y vestido y en qué calidad y cantidad a nuestras familias (peor todavía por la pandemia), de cómo nos curamos de nuestras enfermedades (si es que podemos, en vista de la falta de recursos económicos) y de cómo las diferentes clínicas u hospitales les hacen falta medicamentos, de cómo aumenta la violencia, de en qué condiciones toman clases los niños, niñas y adolescentes, etc.
Más bien deberíamos preguntarle al gobernador ¿por qué no lo hizo?, ¿qué fue lo que le impidió realizarlo?, ¿por qué, si el pueblo chihuahuense voto por él en su tiempo, ahora nos está quedando a deber? ¿Qué acaso nosotros los chihuahuenses pobres y humildes no merecemos un trato justo? E invitarlo a que reflexione de manera muy profunda sobre su paso en el gobierno. Ya que finalmente los que pagamos los platos rotos por una mala práctica política, somos los pobres.
El Antorchismo Nacional siempre ha velado, organizado, educado y luchado porque las condiciones de vida de pueblos y colonias, de obreros, campesinos, colonos y estudiantes mejoren. Y el Antorchismo chihuahuense no es la excepción; durante el gobierno de Javier Corral dimos muestra más que sobrada de organización y de lucha en las cientos de veces que acudimos en tiempo y forma a las diferentes gestiones al Palacio de Gobierno, siempre respetando la ley y haciendo uso de nuestros derechos constitucionales; siempre organizados, en gestión y en pie de lucha sobre servicios básicos para pueblos y colonias, materiales para el mejoramiento a la vivienda, lotes para vivienda popular, apoyos para el campo, educación , entre otras; sin obtener una respuesta favorable para miles de chihuahuense organizados en Antorcha.
Termina el mandato del gobernador, sin pena ni gloria, y se avizora un cambio en pro de los chihuahuenses con María Eugenia Campos Galván y así lo espera, con buen ánimo, el antorchismo.