Un contundente editorial del Financial Times enciende las alarmas sobre la indiferencia de las petroleras ante las nefastas consecuencias del cambio climático Julia Alegre Barrientos
“El mundo se está calentando más rápido de lo que los científicos habían previsto”. Con este concluyente titular, el ‘Financial Times’ ha querido dar la voz de alarma sobre una situación que no es nueva, pero sí ha llegado a un punto de no retorno al menos que se establezcan líneas de acción claras que pasan, inevitablemente, por el compromiso de las grandes petroleras del mundo. El calentamiento global es real, ya está aquí y se ha acelerado a un ritmo difícil de vaticinar en apenas un año.
El aviso del prestigioso diario llega después de que Amin Nasser, director de Saudi Aramco (el gigante de Arabia Saudí dedicado a la explotación de petróleo, gas y productos petroquímicos) asegurase que había llegado el momento (palabras textuales) de “abandonar la fantasía de eliminar gradualmente el uso del petróleo y gas”. Esto porque, a su entender, la “transición energética ha fracasado en la mayoría de frentes”. La inquietante afirmación del jeque llegó en un momento de su discurso durante la conferencia CERAWeek energy 2024, celebrada en Houston (Estados Unidos) entre los días 18 y 22 de mazo. Según cuenta el ‘Financial Times’, Nasser fue ovacionado de manera unánime por los ahí presentes, en su mayoría CEOs de empresas energéticas y líderes mundiales llegados a la ciudad estadounidense para hablar del futuro de la industria.
Sus palabras han sentado como un jarro de agua fría para quienes centran sus esfuerzos en alertar sobre las consecuencias nefastas que se traducen de que nuestro planeta –y, en especial, los océanos– continúe con esta tendencia al alza en sus temperaturas. Un día después del pronunciamiento del responsable de Aramco, Celeste Saulo, director de la Organización Mundial de la Meteorología de Naciones Unidas (WMO), se subió al mismo escenario privilegiado para compartir los resultados de un nuevo informe realizado por su organismo. La acogida fue nula. Cero aplausos, cuenta el ‘Financial Times’. Según la citada investigación de la ONU publicada a finales de marzo de este año, los récords del cambio climático no solo se han alcanzado, sino que se han “aplastado” y superado hasta niveles nunca antes rebasados. No solo 2023 ha sido el año más caluroso desde que se tienen registros, sino que el 90% de los océanos han experimentado una variación en su temperatura que no se esperaba y que los científicos no logran explicar.
Pero hay más: el año pasado, los glaciares sufrieron el mayor retroceso del que se tiene conocimiento y la extensión del hielo del Océano Antártico disminuyó a unos niveles jamás vistos. “Ha sido una auténtica sorpresa. El aumento de la temperatura de los océanos está fuera de las escalas de los registros históricos. Un comportamiento completamente inusual y todavía necesitamos entender por qué. El pico que han alcanzado las temperaturas se ha producido más rápido de lo que todos habíamos anticipado”, explicó otro de los grandes científicos en la materia, Jim Skea, presidente del Panel Internacional de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, durante una reciente conferencia que nada tiene que ver con la que se celebró en Houston.
Una de las principales razones que señalan los expertos para tratar de explicar el aumento de las temperaturas de los océanos es el giro que ha experimentado en los últimos años el compromiso de las grandes petroleras a la hora de reducir su producción a favor de una transición hacia energías más sostenibles y limpias. Cabe resaltar que la ONU señala a estas compañías como las principales responsables de que el calentamiento global esté disparado y continúe su tendencia imparable. El principal argumento en el que se basan las petroleras para justificar su cambio de postura es que la demanda de combustibles fósiles existe, todavía impulsa la economía global y, como tal, su trabajo, tarea y objetivo empresarial es satisfacerla.
En últimos años, denuncia el ‘Financial Times’, muchas de estas multinacionales dedicadas a la extracción de petróleo han rebajado sus objetivos ‘climáticos’ y sus iniciativas de cara a revertir el calentamiento global o, como mínimo, no azuzarlo. Un cambio de tendencia que denunció el propio António Guterres, secretario general de Naciones Unidas, durante el Foro Económico de Davos.»Siguen compitiendo por expandir su producción con un sistema de negocio incompatible con la supervivencia humana. Necesitamos poner en marcha planes transparentes y creíbles para alcanzar el objetivo de emisiones cero. Muchos de los criterios que utilizan estas compañías son confusos y dudosos, y sirven para engañar a los consumidores y a los reguladores, y para crear una cultura de desinformación», sentenció el máximo responsable de la ONU.