Ana Romero
El sentido del humor humaniza tu marca personal: Atrévete a reír!
Uno de los cargos relacionados a mis roles profesionales multifacéticos que me tomo “muy en serio” como todo lo que me importa cuando me involucro, es el humor. Como comediante de Stand up Comedy, tengo una responsabilidad que es la de entregarme en cuerpo, mente y alma a mi público, con el único fin de hacerlo reír.
El Stand up es un arte que no se improvisa, por el contrario, tiene una estructura que se vislumbra a través del monólogo, elaborado a través de la técnica del stand up comedy. Dicho monólogo se practica muchas veces antes de salir al escenario para que la conexión sea limpia y sostenible en el tiempo. Me he permitido empezar éste artículo con una breve explicación de lo que hacemos los comediantes antes de subir al escenario por mi agradecimiento al humor en todo nivel, ya que es gracias a la comedia que he podido aprender a quitar lo peor de mí, transformarlo en arte y avanzar en mi camino de vida personal ya que dentro de mi visión de éxito, para ser grandes profesionales, primero debemos de tratar de ser buenas personas y la comedia ha sido, es y seguirá siendo un buen catalizador para conocerme mejor y saber cuál es mi verdadera propuesta de valor. Hoy por hoy, ser comediante en el mundo empresarial ya no me avergüenza, todo lo contrario, me empodera porque soy consciente de que el humor es una competencia que forma parte de mí y tiene un gran peso dentro de mi marca personal.
El sentido del humor humaniza tu marca personal
El sentido del humor, te muestra tal y cómo eres, y saca siempre lo mejor de ti. Tener sentido del humor, significa atreverse a reírse de uno mismo (reírse, no burlarse), de sus errores, y por supuesto, reírse con los demás. Sin duda, el humor es una herramienta clave que si la sabes usar de la manera adecuada, te puede ayudar muchísimo no solo a nivel personal sino que también a nivel corporativo ya que te hace ser un profesional mucho más resiliente.
Nuevos estudios demuestran que la risa puede lograr resultados asombrosos en las empresas
De acuerdo a Iván Abreu Anaya, La seriedad siempre se ha asociado a la profesionalidad, sin embargo, nuevos estudios ponen en entredicho esta impresión. Según los expertos, la falta de humor y risas en la oficina son el principal promotor del estrés laboral. Cuando reímos, ponemos en marcha unos cuatrocientos músculos, lo que equivale a unos 15 minutos de bicicleta. Los estudios han confirmado que, además de quemar calorías, reír ayuda a mejorar la perspectiva ante los problemas. Según Siobhan Hammond, el humor propicia un ambiente en el que los colaboradores se sienten bienvenidos, cómodos y relajados, inspirando a la gente a expresarse. Asimismo, confirma que durante la etapa infantil una persona puede llegar a reírse a diario unas 300 veces. En cambio, según los expertos, en la edad adulta lo hacemos menos de 80 veces al día. La risa reduce la producción de hormonas que causan el estrés, por lo que la recomendación seria mantener vivo nuestro “niño /a” interior.
El sentido del humor aumenta la productividad de los colaboradores
El sentido del humor, inhibe nuestros cerebros de muchas barreras que nos impiden ser más creativos y productivos en lo que hacemos facilitando las relaciones interpersonales fomentando la comunicación y el intercambio de ideas poderosas para la transformación de un ambiente hostil a un ambiente cercano, empático e inclusivo en la cultura corporativa.
Profesionalismo y sentido del humor son perfectamente compatibles y complementarios.
Confundimos profesionalismo con ausencia de humor, como si la capacidad de hacer reír y de reírse de uno mismo fuese un desmerecimiento. Entonces comprenderán que para una comediante de stand up comedy como yo, es bien difícil ajustarme a los fuertes paradigmas de los prejuicios contra el humor en los negocios. Yo no soporto no reírme más de una hora y es que estoy completamente convencida de que el sentido del humor, ayuda no solo a hacer tu trabajo con excelencia, sino también el de tus compañeros, haciéndolo mucho más productivo.
En los negocios caemos en el estereotipo radical de un paradigma de creencias que limitan la experiencia real de lo que significa “tener sentido del humor” en los negocios y/o campo corporativo.Hoy por hoy, para ser profesionalmente aceptable, la empresa tiene que ser “seria”, pero si una empresa no es “seria”, entonces no es profesional, disminuyendo la reputación, imagen o marca del negocio, impactando en la confianza de los clientes y finalmente en los números de las ventas. Los conceptos extremos serían los siguientes:
– Seriedad es igual a profesionalismo
– Humor es igual a no ser profesional o poco profesional
Entonces lo que realmente debemos de aprender aquí es que la palabra “seria” no necesariamente implica ser profesional. En mi vida, he conocido muchas personas serias y muy poco profesionales, como también he conocido personas muy divertidas con un sentido de humor impresionante y altamente profesionales, por ende un primer paso para entender y aceptar más el humor en el día a día laboral es aprender a separar los conceptos de manera objetiva y entender que “ser serio” no significa necesariamente “ser profesional”, así como “tener sentido del humor” no necesariamente es ser poco o nulo profesionalmente.
La psicóloga Pilar Sordo arrancó la investigación sobre “el mal humor” en América Latina, que duró casi 4 años descubrió en donde explica éstos paradigmas de ésta manera:
“Extrañamente las personas de mal humor empezaron a ser vistas como inteligentes, maduras, creíbles, sólidas, cultas y generan sensación de compasión porque suponemos que tienen problemas importantes, pero el positivo es un personaje livianito, de poco contenido y con pajaritos en la cabeza, es un ser inmaduro”
Una de las cosas que valoro y amo en ésta vida es reír. La comedia me ha aportado no sólo a nivel personal, sino a nivel profesional también, porque me ha ayudado a sobrellevar tensiones laborales, negociaciones difíciles y debates fuertes en los que el humor ha sido clave para poder superar dichos obstáculos. Sin embargo, la comedia, la risa, el humor está muy mal visto en los negocios.
De acuerdo a Sordo, hay que reivindicar la risa porque la risa fuerte, con la boca abierta es como de gente mal educada, como que le faltó pulirse. Entonces, parece que hay que reírse con el culo apretado y mostrando poco diente. También agregó que las mujeres cuando tenemos un ataque de risa naturalmente nos tapamos la boca con la mano, como para parecer finas, mesuradas y elegantes. Sobre éstos comportamientos, Pilar decidió hacer un ejercicio que concluye en la incomodidad de la gente frente a personas que se ríen a carcajadas y concluyó tristemente que los ataques de risa generan incomodidad irónicamente.
Debido a los conceptos anteriores, reírse en los negocios parece un acto infame, un tabú, algo muy mal visto y poco profesional. Estamos tan concentrados en querer en que los clientes nos contraten que dentro de nuestro léxico, estamos acostumbrados a decir frases como “queremos que nos tomen en serio”, frase que connota la expectativa de que “nos den confianza y tomen en cuenta como verdaderos profesionales”. El error está en que tomamos la primera frase como algo literal y nos olvidamos de la parte divertida del negocio, ésa parte que nos hace vibrar, ésa que nos recuerda el por qué hacemos lo que hacemos, la motivación, el espíritu, el propósito, el valor de nuestra gente, logrando inconscientemente una monotonía extrema, parecida casi a una rutina de un matrimonio rutinario cansado y agotador. Entonces no se trata de que querer que nuestras empresas sean serias literalmente, si no que nuestros clientes nos tengan confianza y nos atribuyan el valor que mereces por nuestras acciones y hechos en el día a día laboralmente.
La importancia del sentido del humor en el trabajo
Finalmente, todo extremo es negativo, con ésta nota no pretendo que todos los días y a todas horas nos estemos riendo, vuelvo a repetir, todo extremo es negativo. Lo que si pretendo es quitar el estigma o el prejuicio al sentido del humor en el campo laboral,siempre y cuando el humor no cruce la línea del respeto entre los colaboradores, colocando reglas apropiadas y de sentido común para que la convivencia sea sana, divertida con respeto siempre y evitarse malos entendidos en la cultura empresarial. Tomarse las cosas con sentido del humor no solo ayuda a nuestra propia salud mental (y a la de la gente que nos rodea); contribuye sobremanera a mejorar los resultados que obtenemos. Tal cual reírse es salud y ahora también productividad. Queda claro que no por tener mejor semblante perdemos el respeto y la admiración del resto del personal.
Al comienzo del artículo empecé agradeciéndole a la comedia y lo hice por entre muchas otras razones, porque es mi catalizador de energía positiva, siendo mi herramienta clave para aterrizar y cuadrar el ego humano de empresaria (rol/etiqueta) y permitirme ser más humana. De hecho, es el humor mi ventaja competitiva en mis Conferencias Power en el sector corporativo.El humor me permite conectar y trascender de manera horizontal con Gerentes, Secretarias, Jefes, analistas, porque al humor no le interesa tu cargo, ni tu rol, ni tu etiqueta, la interesa que conectes, que te unas y que trabajes en equipo a través de la risa . El error que cometen muchos profesionales hoy en día es identificarse completa y enteramente con su cargo, por ejemplo: ” Pedro es Gerente General de Empresa XYZ. Pedro se siente ese rol siempre, hasta cuando va al supermercado, limitando su experiencia de vida al rol como Gerente y no como Pedro”. Lo que quiero que entiendas aquí y ahora es que tu eres mucho más que un “Gerente”, eres más que tu “rol, etiqueta o cargo”. Si entiendes eso, no solo te hace más humilde, si no más inteligente para poder aprovechar mejor tu vida y que tu mente y lado emocional sea más flexible, menos rígida y por ende con mayor adaptabilidad cal cambio, logrando ser un profesional mucho mas luchador, resiliente y productivo. Deseo para ti que aprendas a reírte más de todo y que le pierdas el miedo al qué dirán sobre tu actitud positiva de las cosas, recuerda que el poder verdadero está en ti y tu eres el que dirige siempre como te sientes en el trabajo y fuera del mismo. Y cuando te vayas a reír, te rías bien, con ganas, de verdad, fuerte, sin filtro, con todo que la vida es una aventura y hay que aprovechar el viaje mientras estemos vivos. ¡Vive Ahora!
A continuación comparto algunos de los beneficios del humor en el trabajo, escrito por un especialista en el tema, Eduardo Jauregui, que además de su trabajo de consultor, es profesor del departamento de Business and Social Science de Saint Louis University, donde imparte clases de Psicología Positiva:
Beneficio 1: El humor reduce el estrés y potencia la salud y las capacidades del empleado
Numerosos estudios han demostrado que disfrutar de un vídeo cómico o un juego divertido inhibe el estrés. Este beneficio tiene una evidente aplicación al mundo laboral. Un clima de estrés laboral influye en el número de bajas por enfermedad y en la capacidad de los empleados enfermos de rendir en un estado físico o psíquico disminuido.
Beneficio 2: El humor fortalece la motivación individual y colectiva
La motivación es una de las principales claves de la gestión. Queremos que nuestra fuerza de trabajo no sólo fiche en su puesto, sino que además se vuelque en su actividad con ganas, ilusión y entusiasmo. La retribución, los ascensos, el aprendizaje y los beneficios que la empresa proporciona a los trabajadores son los elementos básicos de esta ecuación. Pero también el humor puede desempeñar un papel importante, porque se trata de un motivador natural.
Beneficio 3: El humor atrae y retiene a los recursos humanos más valiosos
Si el humor es un gran motivador, por los mismos motivos es también una ventaja competitiva en el mercado del empleo. Un ambiente de trabajo desenfadado resulta más atractivo para cualquier profesional que busca empleo y ejerce un efecto de retención sobre la plantilla ya contratada. Una empresa con sentido del humor obtiene una imagen interna más favorable, un buen clima laboral y una mejorada satisfacción del personal, contribuyendo a facilitar la contratación y retención del mejor talento.
Beneficio 4: El humor estimula la innovación
Una de las claves de la innovación, curiosamente, es la risa. Numerosos estudios psicológicos demuestran que el humor facilita la flexibilidad mental y la capacidad para innovar. Por ejemplo, en un experimento de la psicóloga Alice Isen se comprobó que los voluntarios que veían una película cómica conseguían puntuaciones más altas en un test de creatividad, en comparación con los que veían una película seria. No está aun claro por qué se produce este efecto; si se debe a la reducción del estrés, por ejemplo, o a los cambios de perspectiva que caracterizan el humor. Pero sin duda funciona, y es una manera relativamente fácil y rápida de estimular la chispa del ingenio.
Beneficio 5: El humor optimiza la comunicación interna
Los oradores más experimentados saben que si hacen reír a su público con una broma ingeniosa y pertinente, conseguirán que su discurso tenga un impacto y un poder persuasorio mucho mayor. También se ha comprobado que las bromas hacen que un mensaje resulte más memorable y se recuerde mejor. Pero además, este “regalo” de la risa puede endulzar la amargura de las comunicaciones problemáticas: malas noticias, órdenes, negociaciones, quejas, críticas o confesiones embarazosas. Estudios sociológicos del ambiente del trabajo revelan que este uso del humor puede ser muy útil para optimizar el flujo de la comunicación.
Beneficio 6: El humor favorece el aprendizaje
Aprender cualquier competencia o conocimiento nuevo requiere un proceso de prueba y error, y en este sentido el juego y la capacidad para reírse de los fracasos son fundamentales. Además, el humor favorece la memorización y retención de datos, un resultado que numerosos experimentos de laboratorio han confirmado. Un curso de formación que incluye elementos divertidos en los puntos claves aumenta la probabilidad de que sus asistentes recuerden la información en el futuro.
Beneficio 7: El humor cohesiona los equipos humanos
El humor desempeña un importante papel en las relaciones interpersonales. Un “buen sentido del humor” es una de las características valoradas más positivamente por las personas en sus amistades, y en diversos experimentos se ha comprobado que reír juntos aumenta la atracción entre las personas. El humor positivo tiene un gran poder cohesivo y es un remedio ideal para eliminar las barreras, diferencias y focos de tensión que puedan surgir en el seno de una empresa o de un equipo de trabajo.
Beneficio 8: El humor potencia el impacto persuasivo de la publicidad
Cada vez son más frecuentes las campañas de publicidad que emplean el humor, siguiendo la intuición de millones de vendedores de que un cliente que ríe es un cliente que compra. El humor tiene un gran poder persuasivo, por varios motivos. En primer lugar, porque atrae la atención del público objetivo. En segundo lugar, porque la risa es un gran placer, y por lo tanto un “regalo promocional” perfecto: barato y eficaz. Y finalmente, porque elimina o acorta la distancia entre el vendedor y el cliente, gracias a su efecto cohesivo.
Beneficio 9: El humor fortalece las relaciones con los clientes
El gran poder cohesivo del humor también permite crear lazos duraderos entre la empresa y el cliente. Por mucho que los economistas se esfuercen en demostrar que los consumidores se rigen por leyes frías de utilidad y precio, la compra-venta sigue siendo un acto y un rito social que forja una relación entre personas que va más allá del mero intercambio de dinero y mercancías.
Beneficio 10: El humor crea un entorno más agradable y humano para trabajar
Potenciar el sentido del humor de una organización es una manera muy económica de obtener beneficios que aumentan la productividad y las ventas: mejoras en la selección, la retención, la salud de sus recursos humanos, la innovación, la motivación, la comunicación, la formación, la cohesión de los equipos, la persuasividad de los mensajes de venta, y la relación con los clientes.
Si conseguimos convertir la oficina en un lugar alegre, el trabajo en una actividad divertida, y el lunes en el día favorito de la semana (o al menos en un día menos maldito), habremos mejorado una gran parte de nuestras vidas, y también de las vidas de todas las personas con las que trabajamos. En definitiva, el humor es un asunto bien serio.
Bibliografía