POR: LUCY SANABRIA
Este 2018, las denuncias por abuso sexual en la iglesia católica —en países como Australia, Francia, Estados Unidos o Chile— impactaron en los fieles y el papa Francisco. A unos días de que finalice 2019, el líder del Vaticano pidió a los criminales sexuales —los sacerdotes pederastas y civiles— a que se entreguen a la justicia.
Los escándalos no cesaron este año en contra de la iglesia católica. Tan sólo en Estados Unidos, laCorte Suprema de Pensilvania reveló un informe sobre 300 sacerdotes que abusaron sexualmentede menores de edad —en más de mil casos registrados—.
En este contexto —ya en el cierre de 2018—, el papa Francisco habló sobre el apoyo del Vaticano y la iglesia para erradicar los casos de abuso sexual y llevar “ante la justicia a cualquiera que haya cometido tales crímenes“, de acuerdo con AFP.
Se supone que los sacerdotes no están obligados a denunciar los crímenes ante la justicia —civil, porque la justicia divina es otra cosa—. Sin embargo, el papa Francisco ha considerado que es el deber de los sacerdotes entregarse ante las autoridades por crímenes en contra de menores de edad —y mientras, pueden prepararse para la justicia divina, según el papa—.
Como mencionamos, este año se llevaron a cabo investigaciones en distintos países sobre los casos de abuso sexual cometidos por sacerdotes de la iglesia católica —algunos de los casos se registraron desde la década de los 50, del siglo XX, y han permanecido en impunidad—.
Y estas investigaciones pusieron en el ojo del huracán al papa Francisco con un tema que NO es precisamente nuevo, pero más casos salen a la luz debido a la apertura sociocultural.
Mientras, la respuesta del Vaticano siempre ha sido la misma: la iglesia no encubrirá ningún caso, la iglesia condena los abusos y la iglesia destituye o acepta la renuncia de cardenales.Ver imagen en Twitter
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“Comenten abominaciones y siguen ejerciendo su ministerio como si nada hubiera sucedido; no temen a Dios ni a su juicio, sólo temen ser descubiertos y desenmascarados”, ha sido parte del discurso de Francisco por las historias que sucedieron:
Chile —por el encubrimiento por parte del entonces obispo Juan Barros y la iglesia chilena—.
En Australia — George Pell, excardenal, que fue acusado por un tribunal de Melbourne de abusar sexualmente de dos menores de edad—.
En Francia —los dos sacerdotes que se suicidaron tras ser acusados de pederastia—. Y el informe de la Corte Suprema de Pensilvania, Estados Unidos.Ver imagen en Twitter