C. Andrade/ AFP y DPA/ Excélsior Digital –
La monarquía británica, el gobierno y los ciudadanos expresaron sus últimas condolencias previo al funeral de la reina Isabel II, programado para hoy en la Abadía de Westminster.
La familia real agradeció las muestras de afecto por la monarca fallecida el 8 de septiembre pasado.
El rey Carlos III y la reina consorte, Camila, expresaron su emoción con mensajes de apoyo.
“Nos sentimos profundamente conmovidos por los numerosos mensajes de condolencia y apoyo que hemos recibido de este país y de todo el mundo”, expresó Carlos III.
El monarca recordó la respuesta en las cuatro regiones británicas, Inglaterra, Escocia, Irlanda del Norte y Gales.
Además, el príncipe Andrés despidió a su madre.
“Mamá, tu amor por un hijo, tu compasión, tus cuidados y tu confianza los atesoraré para siempre”, escribió en un mensaje quien los medios británicos solían referirse como el hijo favorito de la reina.
Reino Unido guardó ayer un minuto de silencio en recuerdo de la reina en el último día de la capilla ardiente instalada en Westminster y en víspera del funeral de Estado.
En la capital británica, cerca del Puente de Londres, a las 20:01 horas (tiempo local) y tras las campanadas del Bog Ben, ciudadanos bajaron la cabeza cumpliendo el minuto de silencio que terminó con un fuerte aplauso.
Decenas de agentes de la Policía Metropolitana que estaban muy cerca, custodiando la fila de la capilla ardiente, también participaron y después cantaron el himno británico.
En el Número 10 de Downing Street, sede del Gobierno, la primera ministra, Liz Truss, estuvo en la puerta del inmueble.
En Chester, en la plaza del Ayuntamiento, se realizó una vigilia a la que acudieron unas cien personas.
A las 22:50 horas (tiempo local) las autoridades anunciaron el cierre de la fila para ingresar a la capilla ardiente en Westminster.
Recepción de alto nivel
El rey Carlos III recibió ayer en el Palacio de Buckingham a los dirigentes mundiales que viajaron a Londres para asistir al funeral.
En total son 500 invitados, entre los cuales están presidentes, primeros ministros y miembros de las familias reales de todo el mundo.
También estuvieron los príncipes de Gales y otros miembros de la familia real británica como los condes de Wessex, los duques de Gloucester y la reina consorte, Camila.
Al palacio llegaron diez autobuses con los invitados.
El negro fue el color predominante de la vestimenta de los asistentes, en señal de luto, mientras que algunos llevaban trajes tradicionales de sus países de origen.
Participaron también el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, y el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
Despliegue
Las autoridades británicas se preparan para los funerales de Estado de la reina Isabel II con un dispositivo de seguridad para proteger a los cerca de 500 jefes de Estado y Gobierno que estarán presentes en Londres.
El dispositivo de seguridad incluye: 10 mil policías, mil 500 militares y 142 miembros de la Marina Real.
La Policía Metropolitana, la Policía de de Londres y la Policía de Transporte Británica activaron las labores de seguridad luego del anuncio de la muerte de Isabel II el 8 de septiembre pasado, según la cadena CNN.
Recinto excepcional
La Abadía de Westminster es la sede del funeral de Estado de la fallecida monarca.
Es la iglesia histórica donde se corona a los reyes y reinas. Ahí fue la ceremonia de coronación de Isabel II en 1953.
El recinto fue reconstruido por Enrique III en 1245, recordó la cadena BBC.
Con capacidad para dos mil personas, la abadía ha sido sede de 16 bodas reales.
Es el lugar de descanso eterno de 30 reinas y reyes.
Desde 1987, el histórico inmueble está considerado patrimonio cultural de la humanidad.