by FERNANDA GONZÁLEZ
¿Qué pensarías si te encuentras con Roger Federer? ¿Lo podrías reconocer? Tal vez si eres amante del tenis lo reconocerías de inmediato, pero no todos tenemos los mismos ídolos y de una u otra manera, por esa razón la leyenda no podía entrar a Wimbledon hace poco.
Si bien es cierto que se trata de un ocho veces campeón del Grand Slam sobre hierba, una mujer de seguridad siguió las reglas de su trabajo al pie de la letra, por lo cual, cuando Roger se presentó en las instalaciones de Wimbledon sin membresía, no hubo acceso.
La anécdota ya parece hasta chusca; sin embargo, el mismo Federer la contó en ‘The Daily Show’, programa de televisión que conduce Trevor Noah.
La curiosa aventura de Roger Federer y su membresía en Wimbledon
Roger Federer se despidió del tenis profesional en septiembre de 2022, con la edición más emotiva de la Laver Cup; no obstante, sigue ligado a este deporte y regresó a Londres para buscar una segunda opinión sobre el estado de su rodilla, ya que las lesiones le impidieron seguir jugando.
El plan de Federer no incluía una visita a Wimbledon, ya que no sabía si tendría tiempo de pasar por el club. Eso provocó que no avisara sobre su posible presencia y él mismo confesó que no suele estar por ahí más allá de cuando se juega el Grand Slam.
“La cita con el doctor quedó lista, vimos el reloj y tenía dos horas por matar. ¿Qué hacemos? ¿Vamos al aeropuerto o vamos a tomar el té a Wimbledon? Realmente no había estado en Wimbledon fuera del torneo. Llegué a la puerta donde los invitados entran y fui a hablar con la mujer de seguridad, pensé que tenía todo bajo control… y no.
“Ella preguntó: ‘¿Tienes una tarjeta de miembro?’. Y pregunté si teníamos una porque cuando ganas Wimbledon, te conviertes en miembro automáticamente. Dije que era miembro y que normalmente estaba ahí jugando, que entraba por otro lugar. Me mandó al otro lado, pero dijo que tenía que ser miembro“, contó Federer entre risas.
Roger Federer siempre se ha caracterizado por ser un jugador amable y no suele aprovecharse de sus logros para que lo reconozcan; no obstante, esta vez los jugó como última carta… y tampoco le ayudaron, así que se marchó bastante apenado.
“La vi una última vez en pánico. Lo siento mucho porque no puedo creer que dijera eso, todavía me siento mal por ello: “He ganado este torneo 8 veces, por favor. Créame, soy miembro”. Salí a otra parte, me bajé del auto y una persona random me reconoció. Los guardias estaban ahí, organizaron todo y entré a tomar el té“, finalizó Federer todavía muy divertido.