Donald Trump, candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, anunció que, de ganar las elecciones del 5 de noviembre, ejecutará un plan para deportar a un gran número de haitianos residentes en Springfield, Ohio, como parte de lo que describe como “la mayor deportación de migrantes irregulares en la historia de Estados Unidos”.
Este anuncio fue hecho durante una conferencia de prensa en Rancho Palos Verdes, California, en un contexto amplio de declaraciones y políticas migratorias controvertidas por parte del candidato.
El enfoque de Trump hacia Springfield no es casual. Durante el debate presidencial del 10 de septiembre, transmitido por ABC, Trump realizó declaraciones falsas sobre la comunidad haitiana en esa localidad, afirmando erróneamente que los inmigrantes “se están comiendo los perros y los gatos” de la ciudad
Estas declaraciones han tenido consecuencias directas en Springfield, donde se han registrado amenazas de bomba contra la comunidad haitiana, lo que llevó a la evacuación de dos escuelas primarias y al cierre de una secundaria, según ABC News.
La ciudad de Springfield ha tenido que intervenir para aclarar que no existen informes creíbles de consumo de animales domésticos, y aunque la portavoz de la ciudad, Karen Graves, indicó que no se han reportado crímenes de odio recientes contra los haitianos, sí mencionó que han sido objeto de “delitos de oportunidad”.
Actualmente, la mayoría de los 15,000 haitianos en Springfield están en el país de manera legal, aunque Trump generalmente ha dirigido su retórica contra inmigrantes irregulares.
Trump, quien también utilizó la conferencia para expresar su apoyo a los residentes afectados por deslizamientos en California, volvió a arremeter contra los migrantes haitianos y otros grupos, sosteniendo que están destruyendo el modo de vida americano.
Además, responsabilizó a Kamala Harris por la crisis migratoria, reiterando su postura dura en temas de inmigración y seguridad fronteriza.
Este clima de tensión y política agresiva continúa dominando el discurso de Trump en su carrera hacia la Casa Blanca, prometiendo acciones drásticas que resonarán tanto en los ámbitos legales como en los sociales dentro de Estados Unidos.